El guardameta celeste destaca que el equipo debe seguir en la misma línea de cara a la nueva «final» del sábado
17 abr 2019 . Actualizado a las 13:57 h.El céltico Rubén Blanco, galardonado por la afición como el mejor del equipo en el mes de marzo, reconoció que no fue un buen período para el equipo a nivel colectivo, pero instó a fijarse en lo que queda por delante. «No podemos mirar atrás», indicó aplicándolo también al duelo de la pasada jornada frente al Atlético, ya en abril. «Íbamos con ganas de sacar algo, la dinámica era positiva e hicimos un buen partido, pero de nada sirve lamentarse porque el sábado tenemos una final», añadió sobre el compromiso frente al Girona en Balaídos.
El mosense ve en el Girona a «un gran equipo» que sin embargo se ha metido en una dinámica negativa y está «en una situación parecida» a la de los celestes. «Estar abajo es complicado para todo en general. Nos vamos a jugar mucho los dos, pero nosotros más porque jugamos en casa y estamos por debajo», valoró aún destacando que para el equipo que dirige Eusebio Sacristán también habrá «mucho» en juego.
El Celta está ahora mismo con «buenas sensaciones», a diferencia con lo que ocurría hace un par de semanas. «Teníamos esa impotencia de no ser capaces de hacer y no saber hacia dónde íbamos. Esa sensación ya no la tenemos», apuntó Rubén. Y repitió que la del sábado vuelve a ser la primera de seis finales que tienen por delante. Entiende que deben seguir trabajando «en la misma línea» en la que están.
Rubén es de la opinión de que se «equivocarían» si se ponen a echar cuentas y no quiere cifrar la salvación en un número de puntos determinado. «El Rayo hace dos semanas ganó al Valencia cuando a priori piensas que el equipo que está sacando puntos es el Valencia. Creo que que en lo que queda se va a decidir el trabajo de una temporada, aunque no debería ser así», apreció. Sí asumió que ganando los de casa la salvación estará más próxima.
Tampoco quiere el portero celeste fijarse un objetivo en lo que se refiere a los puntos de esta próxima semana de tres partidos. «Obviamente queremos los nueve, pero estas semanas cortas con muchos partidos son importantes porque no te das cuenta y han pasado tres jornadas. Puntuar en estos tres sería muy determinante».
Rubén quiere ganar cuantos más partidos mejor y considera que «a estas alturas da igual cómo». «La línea la tenemos hace tiempo, si se deja la portería a cero es un paso importantísimo, pero en los últimos dos en casa no se dejó y yo era el más feliz». Además, cree que frente al Girona «de no ganar no se pone imposible, pero sí muy complicado», del mismo modo que ganar «sería un paso importante pero no definitivo porque queda mucho».
Además, Rubén volvió a destacar preguntado al respecto la gran importancia de Aspas, pero admitió que le "cansa" hablar de ello. «Hay que dejarle tranquilo y que siga haciendo los grandes partidos que está haciendo», pidió.