«Se veía que podía conseguirlo»

MÍRIAM VÁZQUEZ FRAGA VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

@LALIGA

A Thaylor y a Hicham, que compartieron ataque con Borja en el Celta B, no les sorprende su irrupción en la élite

23 abr 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Borja Iglesias vivirá su segunda vez contra el Celta mañana vistiendo la camiseta del Espanyol. Volverá a ser en Primera, pero las cosas son muy diferentes a aquella jornada de Liga en la que el estreno en la categoría del delantero compostelano era toda una incógnita y su desvinculación del club vigués aún estaba reciente. Han transcurrido ocho meses en los que le ha dado tiempo de marcar trece goles, unos números a la altura de muy pocos debutantes en la máxima categoría y que le han servido para reivindicarse y dejar claro que, pese a tener que esperar hasta los 25 años para tener su oportunidad, estaba preparado para la élite.

Quienes coincidieron con él en el filial celeste no dudan al afirmar que ya entonces veían en Iglesias a un potencial futbolista de Primera. «Otra cosa era que quienes deciden le dieran la oportunidad, pero estaba claro que tenía condiciones», destaca Thaylor Lubanzadio, al que no le sorprende «nada» que las cosas le estén yendo bien en esta primera temporada en Primera. De la misma opinión es Hicham Khaloua. «A alguien que ha jugado con él como es mi caso no puede cogerle de nuevas lo que está haciendo. Se veía que podía conseguirlo», indica.

Porque al actual jugador del UCAM Murcia ni siquiera le resultan llamativas las cifras que está firmando, dado que entendía que estaban a su alcance por mucho que fuera un novato. Para Thaylor sí que era más difícil prever que fuera a conseguir los goles que lleva a estas alturas. «Siempre cuesta adaptarse a una categoría nueva, además en este caso con estadios que imponen, otro ritmo... Pero a la vista está que él no ha tenido que pagar ese peaje y que ha sabido sacar partido a sus cualidades desde el primer momento», algo que dice celebrar como el que más.

Duelo especial contra el Celta

Los dos creen, además, que el duelo contra el Celta va a ser especial para él. Ninguno entiende que la oportunidad que ahora disfruta en el Espanyol no le llegara en el equipo donde ellos compartieron vestuario con Borja. «Va a estar muy motivado», avisa Thaylor. Hicham dice que siempre demostró a sus compañeros que sentía «un gran cariño» por la entidad.

M.MORALEJO

«Estaba claro que Segunda se le quedaba ya pequeña»

Hicham Khaloua, compañero de equipo de Borja en la temporada 2016/2017, la del mítico Panda Team que ahora da su sobrenombre al compostelano, asegura que para él no hay ni un ápice de sorpresa ni en que haya llegado a Primera ni en el nivel que exhibe. «Yo conozco su potencial, sé cómo juega y la facilidad que tiene para marcar goles. Para los que lo hemos visto no hay nada extraño en lo que está consiguiendo. Creo que le tenía que haber llegado hace años», subraya.

Además de haber compartido vestuario con él en Segunda B, Hicham también se enfrentó a Borja la pasada campaña cuando militaba en el Zaragoza y él en el Almería. «Ahí no tuve ya ninguna duda de que la Segunda división ya se le quedaba corta y que en Primera también iba a hacer muchos goles. Es un futbolista que se adapta a cualquier sistema de juego y a cualquier vestuario. Lo está haciendo genial y lo esperaba».

Comenta que le «encantó jugar a su lado». «Es completo, aparte de que finaliza muy bien y la que tiene la enchufa, juega al espacio y eso me venía muy bien. Hicimos una pareja de casi 50 goles», rememora. En lo personal, el recuerdo es inmejorable: «Me invitaba a cenar a su casa y siempre era un apoyo, lo tenías para todo». Le queda la pena de «no haberle visto al lado de Aspas, porque lo merecía».

M.MORALEJO

«El Celta no tendría que haberle dejado escapar»

Thaylor Lubanzadio coincidió con Borja Iglesias en el Celta B entre los años 2013 y 2015 y cuenta que tenerle en el equipo era «un alivio» para sus compañeros. «No fueron temporadas especialmente buenas a nivel colectivo, pero contando con él sabíamos que nos podía resolver los partidos en cualquier momento», destaca. A nivel personal, compartir equipo con él también le daba confianza. «Solía jugar por detrás de él y te daba mucha confianza», recalca.

El actual futbolista del Coruxo destaca que en aquella época ya se veía a las claras que Borja «tenía condiciones para ser un futbolista de Primera, tanto físicamente como de cabeza» y que él estaba convencido de ello y dispuesto a luchar para conseguirlo. «Siempre tuvo un físico imponente, casi 1,90, pero siendo rápido, con mucho gol, yendo bien de cabeza... Muy completo. Por poner un ejemplo reconocible, yo le veo unas cualidades similares a las de Ibrahimovic», indica.

Lo que sí le ha sorprendido es que su debut en la categoría no fuera vestido de celeste. «Yo creo que ahora que han visto lo que era capaz de hacer se habrán dado cuenta de lo que han perdido», reflexiona. Considera que a la larga habría sido un gran relevo para Iago Aspas e intuye que «quizá el club no se portó bien con él». «Tendrían que haber hecho todo lo posible para que se quedara. No tendrían que haberle dejado escapar».