«Recuerdo las bicicletas de Aspas a Esteban en su primer entrenamiento con nosotros»

La Voz VIGO

GRADA DE RÍO

M. MORALEJO

Antonio Núñez recuerda las primeras sesiones compartidas con el moañés en el primer equipo

10 may 2019 . Actualizado a las 22:34 h.

Antonio Núñez recuerda a la perfección la primera vez que Iago Aspas entrenó con el primer equipo del que él formaba parte por aquel entonces, en el año 2006. Partiendo de la base de que «nunca sabes a dónde van a llegar los chavales del filial», sí recuerda que las cualidades y el potencial del canterano saltaban a la vista. Por eso desde aquella primera ocasión, era frecuente que entrenara con ellos y, aunque convivió más con Jonathan, también coincidió con su hermano en varias ocasiones.

Lo que más le llamaba la atención de aquel joven atacante (19 años en aquel momento) era su «descaro, desparpajo y atrevimiento», poco comunes en ese perfil de jugadores jóvenes que dan ese paso, comenta. «Muchas veces los que suben lo hacen de manera tímida, con demasiado respeto. Porque ese respeto por un lado es bueno y hay que tenerlo, pero por otro tienen que soltarse cuanto antes», afirma. Y Iago lo hizo desde aquel primer día, como demuestra a las claras una anécdota que comparte Núñez: «Casi tuvo un problema el primer día porque se puso a hacerle bicicletas a Esteban y a él no le sentó muy bien. ¡A la cuarta le pegó una patada para que espabilara», rememora entre risas.

El Iago que se le viene a la cabeza cuando echa la vista atrás a aquella temporada es un chaval «con cuerpo de niño». «Luego con los años tampoco ha sido nunca un futbolista corpulento, pero en ese momento, cuando estaba en el filial, era aún más menudo, se le veía que estaba por hacerse», dice. Y, al mismo tiempo, se percibían en él «muchas cosas, un gran talento, habilidad y también mucho carácter». Núñez también recuerda que llegó a jugar con él: ambos coincidieron sobre el campo en el partido debut de Iago con el Celta, en Segunda en el 2008 y con Alejandro Menéndez como entrenador.

Confianza en la salvación

Núñez destaca que la vuelta de Aspas tras su lesión ha sido providencial para que el Celta siga vivo en una pelea por la salvación de la que cree que saldrá victorioso. «Con su reaparición el equipo ha vuelto a conseguir victorias sufridas pero muy importantes y confío en que terminen la temporada sin mucho más sufrimiento y puedan empezar a pensar en planificar la siguiente».

Admite que esta última temporada le ha recordado a sus años en Vigo, cuando después de clasificarse para Europa siendo un equipo recién ascendido volvieron a bajar al año siguiente. Pese a eso, asegura guardar grandes recuerdos del Celta.