Un Quinocho a puerta semicerrada

La Voz VIGO

GRADA DE RÍO

XOAN CARLOS GIL

El Concello de Vigo no permitirá el acceso a Río Alto ni Río Bajo hasta el día 17

02 ago 2019 . Actualizado a las 22:50 h.

El Celta anunció a través de un comunicado pasadas las 22.00 horas de este viernes la suspensión de las jornadas de puertas abiertas previstas en Balaídos los días 8 y 9 de agosto, así como que las gradas de Río Alto y Río Bajo no abrirán en el Quinocho el sábado 10 frente al Lazio. El motivo es que el Concello de Vigo informó hoy a la entidad de que tanto esa grada como Río Alto permanecerán «cerradas, sin posibilidad de utilización o visita alguna, desde este mismo instante y hasta el día 17 del presente mes», expone la entidad celeste en su texto.

Las jornadas se habían organizado para que los abonados afectados pudieran comprobar in situ las deficiencias de las grada tras la reforma y colocación de nuevos asientos. El propio club recuerda que su idea era «que los abonados de Río Bajo pudiesen comprobar la comodidad y situación de sus asientos tras la incorrecta y unilateral actuación realizada por el Concello de Vigo». Añaden que «esta entidad, lejos de actuar con premura y diligencia» les trasladó hoy la imposibilidad de acceder a esas zonas antes del inicio de Liga, el sábado 17 de agosto frente al Real Madrid.

«Con esta medida anunciada a finales de una semana en la que se había comprometido a subsanar las deficiencias, el Concello frustra la iniciativa del RC Celta», sostiene el club vigués. Y recuerda que el Concello «inhabilita por completo la totalidad de la Grada de Río, tanto Bajo como Alto, para el partido del Memorial Quinocho» previsto para dentro de una semana frente al Lazio. No tendrán acceso abonados ni medios de comunicación y, advierte el club, queda en el aire la retransmisión televisiva prevista. Ante esta situación, el club no pondrá de momento entradas a la venta para este partido, pese a que hoy mismo lo había anunciado.

El cierre de la Grada de Río para el Memorial Quinocho reduce el aforo del estadio a unos 15.000 asientos y afecta a un gran porcentaje de la masa social del club. Ante esto, el Celta «lamenta profundamente el perjuicio que estas medidas del Concello les causan a sus abonados y solicita de nuevo que a la mayor brevedad posible se subsanen las deficiencias. Además, el club se reserva acciones legales, anuncia.

De esta manera, el estadio presentará un aspecto similar al del Celta-Atlético de octubre del 2017, cuando el Concello decidió también cerrar esta grada por las deficiencias de la cubierta. En ese caso era un partido oficial correspondiente al campeonato de Liga.