La afición volvió a ser protagonista un año más en la web
30 dic 2019 . Actualizado a las 20:05 h.La sección Zona Celeste de Grada de Río incluye entre otros contenidos historias protagonizadas por celtistas. Estos fueron algunos de los rostros, de diferentes edades y orígenes, que tuvieron su hueco en este apartado a lo largo del 2019:
- Joel, desde Alemania para ver al Celta por primera vez. El pequeño Joel, de tres años, acudía por primera vez a Balaídos coincidiendo con el Memorial Quinocho. Su madre, gallega residente en Alemania, relataba la experiencia.
- La emoción de pisar el césped de Balaídos a los 95. El celtismo recibía en mayo el premio a la mejor afición de la temporada y el club apostaba por Agusto Aguiar, uno de los socios nacidos en 1923 como la entidad. El abonado histórico lo vivía con verdadera emoción.
- El abuelo que cogió un avión por primera vez para ver al Celta. Su nieto David relataba sus peripecias para ver al equipo fuera de casa con su abuelo, Carlos Rodríguez Saínza, que nunca había tomado un avión hasta que lo hizo para ver al equipo lejos de Balaídos.
- El niño celtista de Xinzo que emociona al mundo del fútbol. El pequeño Xoel, emocionado en Balaídos, fue captado por las cámaras de televisión. Días después contaba cómo lo había vivido y confesaba su admiración por Sergio Álvarez. Fue invitado a conocer a sus ídolos en A Madroa.
- La amistad entre dos viguesas y el único celtista de Tánger. Las viguesas Marga Rodríguez y Mar Tizón conocieron a Mehdi Matboule, marroquí y celtista como el que más, a través de la página de Facebook de Grada de Río y en octubre los tres se reunieron en Marruecos.
- Dani, el niño al que Aspas hizo sentir un céltico más tras el Celta-Barcelona. Daniel Romay Iglesias, de siete años, saltó desde la grada en pleno ritual de celebración tras la victoria ante el Barcelona durante la Reconquista. Su padre relataba cómo el moañés le permitió vivirlo junto a los futbolistas.
- «Cuando era niña apenas había mujeres en Balaídos». Con motivo del 8 de marzo, varias mujeres responsables de peñas compartían sus experiencias como mujeres aficionadas al fútbol, variadas según la edad de cada una.
- Sara y Álvaro, madre e hijo y una historia de celtismo que se repite. Sara Viéitez, natural de A Pobra y residente en Estados Unidos, es socia desde que nació y, pese a la distancia, ha querido que su hijo también lo sea.
- El celtismo llegaba a Tanzania de la mano de Brais Alonso. Antes había sido China y en el 2019 Brais Alonso mostraba a niños en Tanzania mandando ánimos al Celta.
- Un «sí, quiero» marcado por la remontada del Celta. Iago y Jennifer se casaban el 30 de marzo del 2019, coincidiendo con el partido frente al Villarreal en Balaídos con el que comenzaría A Nosa Reconquista; lo hicieron con una pantalla en el banquete para poder seguir el trascurso del partido.
- «Soy catalán, pero se me inyectó el veneno del Celta y eso es la gloria». Adrià Laborda, de la Peña Blau Cel, catalán y residente en Barcelona, es celtista como el que más y explicaba cómo y por qué en Grada de Río.
- Un celtista en Netflix. Martiño Prada, ourensano y vigués de adopción, reside desde hace años en Estados Unidos, donde ejerce de celtista en una de las empresas más de moda, Netflix.
- Persiguiendo la Reconquista Celeste desde los cinco continentes. Celtistas que iban a vivir el primer partido de A Nosa Reconquista, el Celta-Villarreal, desde diferentes partes del mundo, contaban cómo iban a llevarlo y mandaban ánimos al equipo desde muchos kilómetros de distancia.
- Jurarse amor eterno con el Celta por testigo. Varias parejas en cuyas bodas el Celta estuvo presente de una manera y otra lo explicaban y mostraban las imágenes de sus respectivos enlaces.
- De Argentina a Balaídos en memoria del abuelo Jaime. El argentino Andrés Jerkovic relataba su viaje a Vigo para homenajear a su abuelo, nacido en A Cañiza y emigrado a Buenos Aires y fallecido en 1994 que nunca pudo pisar el municipal vigués.
- La «locura» de acompañar al Celta en Sevilla en la noche de un miércoles de octubre. El pasado octubre el Celta visitaba al Betis en el Benito Villamarín en miércoles por la noche; pese a que las circunstancias no invitaban, allí hubo celtistas, entre ellos Marta Abril, peñista de Celta do Miño.
- La camiseta de Mostovoi que más kilómetros recorre por todo el mundo. Suso López, que lleva años completando maratones luciendo la camiseta de la Champions de Mosotovoi, compartía cómo y por qué empezó con este ritual que sigue manteniendo.
- «Pago 300 euros y cuando es de noche no puedo ir, pero merece la pena». A sus 90 años, Lepoldo acudía a Balaídos el pasado verano a renovar su carné de socio y explicaba su historia de celtismo.
- 13.000 kilómetros de afouteza para encarar la Reconquista. Daniel Clemente, el aficionado que está detrás de la cuenta de Twitter Celtista en Nueva York, explicaba sus peripecias para poder vivir en directo parte de A Nosa Reconquista. Meses más tarde, compartía la noticia de la leucemia de su hijo Álex, que recibía el apoyo del celtismo, incluidos Aspas y García Junyent.
- El orgullo de ser la socia 1923. En el mes de agosto, la aficionada viguesa Patrica Otero presumía del carné de socio que muchos abonados elegirían si les dieran a elegir, el 1923. Meses más tarde, un lotero vigués se hacía con un número correspondiente también a la fecha de nacimiento del club.