Confinamiento activo para volver

X. R. C. / M. V. F. VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

Óscar Vázquez

Los expertos consideran que los futbolistas no perderán la forma ni los hábitos en dos semanas, pero deben prepararse para un regreso que exigirá una minipretemporada

15 mar 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

El parón inesperado por mor de la crisis del coronavirus no tiene por qué afectar a equipos como el Celta si el período de tiempo se ciñe a los 15 días, pero en el plano físico y nutricional quizás exija una revisión si se prolonga en el tiempo. Además, una vez que todo vuelva a la normalidad los equipos necesitarán un tiempo de puesta a punto. En clave psicológica, todo está enfocado ahora en el problema global.

PREPARACIÓN FÍSICA

Un futbolista no pierde su estado de forma en 15 días

Eduardo Domínguez considera que un parón de dos o tres semanas «no significa que el futbolista vaya a perder su estado de forma», aunque cada persona y cada equipo tiene un contexto deferente. El preparador físico vigués, ahora en el Al Shabab de Arabia Saudí, puntualiza que esta situación «puede generar distorsión al no poder seguir compitiendo». Domínguez apunta que, como sucede en el verano, todos los staff le mandaron deberes a sus jugadores. «Me imagino que los preparadores físicos estarán en contacto con los jugadores, les mandarán un programa a corto plazo de cuatro o cinco sesiones y si esto se prolonga en el tiempo seguirán enviándolos, pero depende del profesional que se cumpla», dice, una parte esencial para cuando se reincorpore al trabajo y tenga que recuperar el aspecto balompédico, ya que durante este parón puede mantener la resistencia y la fuerza. Si la pausa se prolonga en el tiempo, puede aparecer una realidad que se denomina «desentrenamiento», algo que suele afectar a los lesionados.

ENTRENAMIENTO

Un tiempo de margen tras el parón para ponerse a punto

José Luis Mosquera, profesor en la Escola Galega de Adestradores, pone todo el acento en el momento. «Isto condiciónanos a todos, hai que parar o brote», por eso apunta que desde su prisma lo ideal sería parar un mes (si la situación lo permite) y marcar los ciclos: «Se paras un mes podes darlle á xente quince días fóra e logo terías outros quince para poñelos en forma», indicando que los deberes, estando en sus casas, dependen de cada sujeto: «Agora os futbolistas son máis profesionais e cóidanse máis, e ao non haber labor de equipo teñen que centrarse a nivel físico». Precisa que a los futbolistas les gusta que les marquen las pautas de trabajo a diferencia de otros colectivos: «No fútbol estamos afeitos a que nos manden, non sucede coma noutros deportes, onde están máis acostumados a este tipo de situacións».

psicología

La mente centrada en la evolución de la enfermedad

«Hay una incertidumbre deportiva y otra de salud, porque estamos ante un fenómeno que nunca hemos vivido», comenta Julio Álvarez-Buylla, máster en psicología deportiva y entrenador nacional de fútbol, que cree que en estos momentos, los futbolistas de élite también «a nivel psicológico están muy centrados en la evolución de enfermedad y todos tenemos los ojos puestos en las medidas». A nivel particular, tampoco ayuda desconocer si se va a reanudar la liga y cuándo sería en el mejor de los casos: «Me imagino que la Federación dará un plazo para que los equipos se puedan poner a punto. Si esto acaba en tres semanas, no creo que se puedan poner a competir ya, sino que necesitarán un tiempo de adaptación porque ahora mismo todo está en el aire», apuntando que lo lógico es que todos los deportistas se llevaran a casa un plan de trabajo físico y otro de alimentación.

NUTRICIÓN

Mantener el plan colectivo a nivel individual

La alimentación no debe ser un problema si el parón es de quince días, siempre que se sigan las pautas. «Al tener un plan y haber tenido un tiempo de haber comido conjuntamente, tendrán claras las pautas que cada uno tiene que hacer a nivel individual. No creo que vaya a afectar que estos días no coman juntos», comenta la nutricionista Bertina Ferrández, que tampoco ve inconveniente en que el cuerpo técnico no pueda continuar con la medida diaria de peso y pliegues: «No es absolutamente necesario, de hecho, con tener una valoración cada semana o cada quince días sería suficiente. Además, con las básculas de precisión se pueden hacer estas mediciones en el domicilio de manera telemática a través de consultas on line con el nutricionista». En caso de alargarse el parón, advierte de que el aspecto nutricional necesitaría una revisión.