El plantel del Celta baja su sueldo para asegurar el 100 % a los empleados

la voz VIGO

GRADA DE RÍO

Oscar Vázquez

El acuerdo con la plantilla del primer equipo parece cerrado, lo que aborta la vía del ERTE y da estabilidad al resto de los trabajadores de la entidad viguesa

09 abr 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

La opción de un ERTE en el Celta parece esfumarse. Los integrantes de la primera plantilla aceptan rebajarse el sueldo con el fin de asegurar que el resto de los trabajadores del club puedan cobrar de un modo íntegro sus salarios. El acuerdo parece cerrado y solo falta por conocer los detalles en función del coste económico que la pandemia tenga para la entidad, aunque en estos momentos el escenario más probable pasa por terminar la liga en verano y a puerta cerrada, lo que permitiría al club salvar el dinero pendiente de los derechos audiovisuales, unos 12,5 millones. Falta la confirmación oficial del acuerdo por parte del club, una cuestión que ya ha hecho pública la mayoría de los conjuntos de Primera. Ayer lo hizo el Real Madrid, sin ir más lejos.

Los contactos entre la cúpula del club y los capitanes se han ido sucediendo en las últimas fechas y en estos momentos ese acuerdo parece cerrado a cambio de conservar íntegro el 100 % de las retribuciones de los demás empleados del club. En la actualidad el Celta tiene 185 asalariados (136 adscritos al club, 9 en la sociedad Afouteza e Corazón y 40 en la Fundación Celta de Vigo). De ellos, 24 son futbolistas profesionales del primer equipo, que es con quienes se ha suscrito el acuerdo.

Falta por conocer la letra pequeña del pacto, en donde se deben contemplar todos los escenarios, aunque el mayor descuento solo se aplicaría en caso de cancelarse la competición, un decorado que a día de hoy parece descartado escuchando al presidente de LaLiga y a los responsables del fútbol europeo. De acabar, es posible que la reducción de salarios para los futbolistas sea mínima de todo, aunque en esta negociación todo apunta que los jugadores han puesto por delante los intereses colectivos de la mayoría de los trabajadores a los particulares.

Para la temporada en curso el Celta tenía presupuestado un gasto en personal de 45.651.395,12 euros, de los que 38,7 millones iban destinados a sueldos y salarios de la plantilla deportiva según consta en las cuentas del club, en donde también se apunta que el resto de personal (desde los directores a los demás empleados) se llevan 5,1 millones. Todo en un presupuesto de 87 millones de euros con un superávit previsto por encima de los tres millones.

A estos números, que quizás no se lleguen a materializar en su totalidad por la pandemia, hay que añadirles la situación de bonanza económica de la entidad, con 26 millones en caja de remanente y un patrimonio neto de 90 millones, además de superar con buenas nota todos los ratios de liquidez y sin contar los 20 millones del traspaso de Lobotka.

Esta situación permite al Celta afrontar la crisis económica derivada del coronavirus en una envidiable situación, aunque no exento de percances si la situación se mantiene en el tiempo. A estas alturas la sociedad ya lleva parada más de un mes sin ingresos ni en A Sede, ni en la tienda de Balaídos y mucho menos por partidos, de hecho todo apunta que las taquillas pendientes de los partidos ante Barcelona y Atlético de Madrid (dos reclamos siempre importantes) ya a se han esfumado al estar previsto jugarse a puerta cerrada. Por contra, si se acaba, el Celta recibiría íntegra la principal cantidad que tiene pendiente: el 25 % del ingreso televisivo.

En este escenario el club, que siempre habló de buscar el mejor acuerdo, fue proclive desde el primer momento a mantener los salarios, pero la actuación de los jugadores de la primera plantilla ha sido clave para garantizar todos los emolumentos. Ellos se rascarán el bolsillo.