El portero, que acaba contrato, notó una molestia en la rodilla derecha en un rondo y está pendiente de las pruebas médicas para conocer el diagnóstico
21 may 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Los expertos vaticinaron un evidente peligro de lesiones después de permanecer durante dos meses confinados los jugadores y el Celta ya tiene la primera víctima, el portero Sergio Álvarez que sintió una molestia en la rodilla derecha cuando tomaba parte en un rondo con sus compañeros y ahora está pendiente de conocer el diagnóstico definitivo. La lesión, en función del alcance, podría condicionarle lo que resta de temporada e incluso el futuro teniendo en cuenta que el portero de Catoira termina contrato el 30 de junio, aunque en el peor de los casos la entidad debería tener en cuenta todos los servicios prestados por un hombre de club.
El percance tuvo lugar en la sesión vespertina del martes. El guardameta participaba en un rondo con sus nueve compañeros de turno y notó una molestia que en un primer momento no le impidió continuar, pero al mismo tiempo comenzó a notar falta de estabilidad en la rodilla derecha y decidió parar. Acto seguido fue explorado por los servicios médicos presentes en el campo e inicialmente nadie se aventuró a diagnosticar el alcance real de la molestia, algo que debería conocerse en las próximas horas después de que el meta de Catoira se sometiese a las pruebas médicas.
Los escenarios pueden abarcar desde un susto, a perderse lo que resta de la temporada (las once jornadas pendientes) o incluso, si estuviese afectado el cruzado, tendría para seis meses. Por el momento se guarda cautela.
Sergio es el único jugador de la plantilla (al margen de los dos que pueden ser cortados) que acaba contrato el 30 de junio, pero su continuidad hasta final de temporada no corría peligro alguno por el compromiso que el guardameta siempre ha demostrado con su club y su implicación total en el proyecto.
Lo del futuro ya no estaba tan claro. Óscar García se mostró proclive a su renovación, pero Carlos Mouriño precisó que Sergio siempre tendrá sitio en el Celta pero sin especificar el puesto. A sus 33 años, quizás el club comenzase a pensar en un puesto lejos del verde, pero el portero hasta la fecha siempre había dejado clara su intención de continuar como futbolista.
En el caso de que la lesión truncase el final de temporada, el Celta debería mover ficha de cara a su renovación teniendo en cuenta todos los servicios prestados dentro y fuera del campo desde que llegó a Vigo procedente de la base del Arousa.
La lesión en la octava jornada de entrenamientos tras el confinamiento parece el colofón a una temporada nada buena en lo personal para el meta de Catoira, que en diciembre pasado ya sufrió una lesión en la otra rodilla y tuvo que pasar por el quirófano. Había estado 29 días de baja después de pasarse todas las vacaciones de Navidad en A Madroa para ganar tiempo a la lesión.
En lo deportivo, esta temporada Sergio solo disputó dos partidos de liga (ante Villarreal y Valladolid) y otros tantos de Copa contra Mérida y Mirandés.
Iván Villar y Dragan Rosic, porteros en la recámara por detrás de Rubén
Sin descartar ningún escenario, un contratiempo de consideración en la lesión de Sergio Álvarez no dejaría en esta ocasión la portería casi desamparada como sucedió ya el pasado mes de diciembre. En estos momentos el Celta tiene apto a Rubén Blanco, que viene ejerciendo de titular a lo largo de toda la temporada, y a Iván Villar y Dragan Rosic en la recámara.
El de Aldán, que también pasó por una larga lesión entre diciembre y enero, no disputa un partido con el primer equipo desde el pasado 15 de mayo del 2017 en Mendizorroza ante el Alavés (su única presencia en Primera), pero el curso pasado defendió toda la temporada, y con garantías, la portería del Celta B en Segunda B. El club sostiene que es una sólida opción de futuro y en teoría debería ejercer de portero suplente si Sergio no se recupera antes del 12 de junio.
La tercera opción es el emergente Dragan Rosic, el portero serbio del filial que llegó a Vigo el pasado enero en calidad de cedido por el Almería y con una opción de compra por parte del Celta. En este tiempo ha demostrado seguridad y lo jugó todo con Onésimo Sánchez.
Un año loco en la portería
Los problemas, a nivel de lesiones, en la portería han sido una constante a lo largo de todo el año e incluso tuvieron su repercusión en la base hasta el punto de que el Celta fue alternando porteros suplentes (habitualmente del equipo juvenil) varias semanas al ser Fran Vieites el único disponible para el filial a principios de año.
Ahora la situación parece más controlada aunque contar con Sergio siempre es una garantía dentro y fuera del campo. Es uno de los cuatro capitanes y uno de los jugadores con más ascendencia en el celtismo.