El parón más largo de la carrera de Iago Aspas

La Voz

GRADA DE RÍO

Antonio L. Juárez.

El moañés cumple tres meses sin jugar

29 may 2020 . Actualizado a las 10:04 h.

Aunque el último partido del Celta antes de la pandemia de coronavirus fue el 7 de marzo, Iago Aspas no se viste de corto desde la jornada anterior, frente al Granada el 29 de febrero, hace hoy tres meses. Ese día vio la quinta amarilla -ya se la habían sacado frente al Eibar, pero había prosperado el recurso-, por lo que se perdió la visita al Getafe. Es el período más largo del moañés sin disputar un partido oficial en su carrera profesional.

Esta ausencia de fútbol para Aspas solo es comparable a lo que vivió por lesión el año pasado. Suele recordarse que fueron tres meses de lesión, pero entre medias reapareció en falso. Así, causó baja desde la visita al Camp Nou del 22 de diciembre del 2018 y reapareció con garantías -y con dos goles- el 30 de marzo del 2019, pero tuvo unos minutos en Getafe el 9 de febrero tras los que volvió a resentirse. Es la lesión más importante de su carrera.

Ni siquiera en sus temporadas fuera de Vigo, de protagonismo muy escaso para él, estuvo tanto tiempo sin tener minutos. En Liverpool permaneció dos meses sin minutos por una distensión en el muslo entre octubre y diciembre del 2013 y por decisión técnica tuvo varios períodos sin intervenir que siempre estuvieron en torno al mes.

En su temporada como futbolista del Sevilla, la 2014/2015, aunque con pocos minutos, no tuvo ausencias prolongadas salvo por lesión. Fue el caso del período entre el 8 de febrero y el 22 de marzo del 2015, cuando fue baja por problemas inguinales. Ya recuperado, no tuvo minutos entre el 22 de marzo y el 26 de abril.

Con el primer equipo del Celta, del que entró a formar parte de manera estable en el curso 2009/2010, no ha tenido largos períodos sin jugar salvo la lesión del curso pasado. Destacan otros problemas físicos de menos relevancia y alguna sanción, como la de tres partidos del 2011 tras un Betis Celta que le costó estar casi un mes fuera. Tras el derbi del 15 de marzo del 2013 en que fue expulsado, tuvo que cumplir un castigo de cuatro partidos y no jugó entre el 15 de marzo y el 27 de abril.

Además, por lesiones que no revistieron gravedad estuvo parado alrededor de tres semanas tanto en la temporada 2015/2016 como en la 2017/2018, en ambos casos por lesiones en el muslo.