Cambio radical en la plantilla del Celta B para el próximo curso

la voz VIGO

GRADA DE RÍO

M.MORALEJO

Dieciséis jugadores han causado baja en el equipo de Onésimo, que tiene como objetivo un lugar en la nueva Segunda B Pro

20 ago 2020 . Actualizado a las 21:21 h.

El Celta B, pendiente de la autorización de la Federación, todavía no ha comenzado a entrenar ni ha confirmado un solo fichaje a estas alturas de agosto, pero tiene decidido un cambio radical en su plantel con el objetivo de dar el salto a la Segunda B Pro que se formará la próxima temporada con los 20 mejores del multitudinario curso 20/21 que en teoría debe comenzar en el mes de octubre. De entrada, el cambio se traduce en 16 bajas.

«Tenemos que tratar de hacer un equipo competitivo, que tenga jugadores más veteranos no de edad, aunque procuramos que no pasen de 23 años, si no la experiencia y jugadores más curtidos», comentó al respecto en su última comparecencia el presidente Carlos Mouriño.

Por el momento son bajas confirmadas con respecto a la plantilla de la temporada pasada y contando los futbolistas que estuvieron cedidos Fran Vieites, Farrando, Molina, Moha, Ros, Yeboah, Manolito Apeh, Rosic, Jacobo, Bermejo (que ayer fue anunciado como nuevo jugadora del Zaragoza), Javi Gómez, David Álvarez, Tiago Rodríguez y Martín Rafael. En total, 14 jugadores. A ellos hay que sumarles el vigués Manu Justo, que finalizó su cesión, y a Álvaro Ramón, que acabó contrato (aunque el Celta no incluyó a estos jugadores en la lista) lo que elevaría las bajas a 16.

Los que tienen contrato

Por contra, los nueve canteranos que están en estos momentos realizando la pretemporada con el primer equipo podrían tener acomodo en el conjunto de Onésimo Sánchez: Ruly García, Iago Domínguez, Pampín, Fontán, Solís, Iker Losada, Gabri Veiga, Lauti y Miguel Rodríguez (que todavía está en edad juvenil y podría jugar con el equipo de Jorge Cuesta, al menos en la competición continental).

Tienen contrato en vigor Álvaro Fernández, Sergio Carreira (que ya debutó con el primer equipo), Mangana, Manny, Markel Lozano, Cissé y Obama, pero salvo el canterano y el portero parece difícil que muchos puedan continuar tras apenas tener protagonismo o fueron cedidos, como el caso de Obama. Además, ya ha trascendido que entre los juveniles que suben está Raúl Blanco Juncal.

Mouriño dio pistas sobre los puestos a reforzar en el filial. Enumeró que necesitan centrales, un extremo, un medio y dos delanteros, «un nueve y segunda punta que acompañe a Lautaro», en quien dijo que confían mucho. Indicó que la adaptación de los juveniles al filial suele costar, por eso quieren una mezcla tras las múltiples bajas.

Será por lo tanto una plantilla nueva que Onésimo tendrá que ensamblar para una competición al esprint y con la necesidad de comenzar a tope desde el primer día al disputarse dos fases diferentes. Un mal arranque como el de los últimos años dejaría al segundo equipo celeste sin opciones de poder pelear por la nueva categoría y le llevaría a centrar sus esfuerzos en eludir el descenso a Tercera, que a partir de la próxima temporada en realidad será la quinta categoría del fútbol español.

El Celta B entrenó por última vez a nivel colectivo el pasado mes de marzo, antes del confinamiento, y desde entonces solo tuvieron actividad deportiva los seis jugadores que estuvieron en la dinámica del primer equipo.