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El turcodanés fue el único de los transferibles que salió de inicio en el primer amistoso
28 ago 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Emre Mor fue el único de los jugadores que en teoría tiene el Celta en la puerta de salida que jugó de inicio el primer partido amistoso de la pretemporada. Un dato que cobra relevancia si se tiene en cuenta que solo dos jugadores con la etiqueta de transferibles, Juncà, media hora, y el Toro Fernández, diez minutos, participaron en el partido ante el Oviedo. Una cita en donde el turcodanés sacó a pasear su repertorio técnico, marcó un gol de bandera y se le vio implicado en el trabajo defensivo con un par de carreras hacia atrás. Secuencias que apuntan a un cambio de actitud que ya venía mostrando desde su regreso a Vigo y que debe corroborar ahora antes del inicio liguero.
El extremo llegó a Vigo con parte de los deberes hechos. Durante sus vacaciones se puso a punto con un preparador físico y recurrió al mismo coach que su compatriota Martin Braithwaite, el barcelonista, para recuperar la confianza y centrarse. El propio jugador desveló en una comparecencia en la red social Instagram su deseo: «Quiero ser mejor y voy a ser mejor». Mor elogió a su preparación físico personal: «Mads (Tömörkènyi ) es el mejor y elegí entrenar con él porque tengo mucha ambición y sé que él es una persona ambiciosa. Me está dirigiendo un entrenamiento muy especial, me está beneficiando mucho». Kim Boye se ocupa de la faceta mental. Con los dos trabajó en el campo de Barreiro cuando volvió a Vigo antes de comenzar a entrenar a las órdenes de Óscar García.
Ese cambio hasta la fecha parece radical en todos los frentes. El primero, en el día a día, con el compromiso de trabajo. El segundo en público, cambiando su desafío en las redes por su compromiso con el club. En dos semanas ofició más de céltico que en sus dos años anteriores en Vigo. Y por el momento también en el campo con una buena media hora de juego repleta de calidad, acierto y compromiso.
Media hora que fue reconocida en público por Óscar García Junyent que ayer volvió a hacer referencia al turcodanés en declaraciones a la TVG: «Tiene un bagaje muy negativo detrás, es una losa, y tiene que intentar cambiarlo, no solo en el terreno de juego, en donde sabemos de sus cualidades, sino en todo lo que rodea a un futbolista».