El Celta vence en un campo maldito dejando la portería a cero
05 dic 2020 . Actualizado a las 05:00 h.El Celta vivió un partido soñado en San Mamés. Sin firmar una actuación sobresaliente, pero manteniendo la portería a cero, resistiendo un inicio en el que el rival fue superior y marcando dos goles para lograr su segunda victoria consecutiva, tercera del curso y primera a domicilio de la temporada. Un triunfo que confirma las buenas sensaciones que transmite el Celta de Coudet, que sale reforzado.
Once
El mismo equipo titular que ante el Granada
Insistía Coudet en la previa en que no tiene un once definido, pero lo cierto es que renovó su confianza en los mismos jugadores que salieron en Balaídos ante el Granada. Después de que la pasada jornada Aidoo se quedara en el banquillo tras haber arrastrado problemas físicos durante la semana, el técnico decidió que partiera otra vez como suplente, apostando de nuevo por Jeison Murillo en la izquierda y Néstor Araujo en la derecha como centrales.
Inicio
Un dominio del Athletic que fue a menos con los minutos
El Celta salió con el mismo once y con la misma idea, pero la puesta en escena del Athletic dificultó que la pudiera llevar a la práctica como en el partido anterior. Los locales, muy bien plantados, ejercieron una efectiva presión sobre los célticos, lo que les llevó a tener el dominio en el inicio del partido. Con el paso de los minutos, y a base de balón, el equipo vigués fue equilibrando el partido y sacudiéndose ese dominio. Además, el control de los de Garitano no se tradujo en más ocasiones de gol para su equipo. Muniain dispuso de la más clara a pase de Iñaki Williams, mientras que para el Celta un disparo de Lucas Olaza fue la llegada más peligrosa del primer acto. Antes, Santi Mina había fallado frente al portero. Esa acción dio lugar a uno de los dos saques de esquina desperdiciados por los vigueses que desembocaron en contras rivales antes del paso por vestuarios. Y con 0-0 se llegó al descanso.
Desarrollo
Matiz en el dibujo en la segunda parte y ventaja
Tras el intermedio, Coudet hizo un ajuste en fase defensiva, pasando al 4-1-4-1 con Aspas modificando su posición a interior derecho, mientras que en fase ofensiva volvió a ejercer de mediapunta. Poco a poco el Celta fue encontrándose mejor y Santi Mina envió al fondo de la red un balón que fue anulado por fuera de juego de Aspas. Justo después, tras un robo de Denis y asistido por el propio Mina, Hugo Mallo hacía el primero del Celta.
Cambios
Las mismas sustituciones que en el partido anterior
Ayer en San Mamés jugaron exactamente los mismos célticos que en Balaídos. Porque el primer cambio fue Aidoo, que propició el cambio a defensa de cinco con esquema de 5-3-2 y, en fase defensiva, 5-4-1. Ya en la recta final entraron también Miguel Baeza y Fran Beltrán. El gol de Iago Aspas llegaba a falta de diez minutos.
Portería a cero
Segundo partido sin encajar esta temporada
Desde la primera jornada de Liga, cuando empató sin goles con el Eibar, no dejaba el Celta la portería a cero. Otra noticia para celebrar en un partido que refuerza al equipo.
