Los dos partidos anteriores del filial celeste fueron suspendidos por casos de covid-19
29 ene 2021 . Actualizado a las 16:20 h.El Celta B retoma la competición este sábado, casi tres semanas después de su último compromiso -la victoria del 10 de enero frente al Coruxo en Barreiro-. Primero fueron los casos de covid-19 en el Guijuelo los que propiciaron el aplazamiento del duelo ante los salmantinos, mientras que después fue el propio contacto de los célticos con un positivo -un juvenil que entrena con el filial- el que desencadenó que no se jugara la semana pasada el encuentro ante el Racing de Ferrol. Ahora, reciben al Pontevedra, que les superó en la ida.
El filial viene de dos victorias consecutivas: la lograda ante el Deportivo en el último partido del 2020 en Riazor y la firmada en Barreiro ante el Coruxo en el primer y único duelo que han disputado en lo que va de año. Son sextos en la tabla con 14 puntos en nueve contiendas. Todos los demás equipos han jugado uno o dos partidos más menos el Guijuelo, que solo ha podido jugar ocho.
El Pontevedra, séptimo, tiene un punto menos y un partido más que el equipo vigués. Llega en una dinámica muy negativa de tres derrotas seguidas precedidas de dos empates, lo que suma cinco jornadas sin los sumar tres puntos. Frente a la inactividad del Celta, ellos jugaron los dos fines de semana anteriores, ya que su partido suspendido fue en el último fin de semana en que sí jugó el filial vigués.
Esta es la primera convocatoria para Diego Barriuso, Barri, el único jugador que ha incorporado hasta ahora el filial en este mercado. En el capítulo de salidas, Souleymane Cissé se marchó cedido al Arenteiro, en Tercera, tras no tener protagonismo en Vigo. Mientras, Alberto Solís sigue siendo baja por lesión y el técnico ha citado a todos los disponibles.
