
El entrenador del Celta reconoció que fue un partido feo y trabado, pero destacó que tuvieron premio por buscarlo hasta el final
28 feb 2021 . Actualizado a las 17:05 h.El entrenador del Celta, Eduardo Coudet, destacó el buen sabor del punto frente al Valladolid (1-1) por el momento en que se consigue, aunque no tuvo reparos en reconocer que no fue un buen partido de su equipo. «Es un punto que nos viene bien para mantener la distancia porque, como decíamos, es un rival directo. Fue un partido feo, trabado, parecía de cero cero, pero terminamos rescatando un punto por la ambición de ir a buscarlo hasta el último minuto», valoró.
Admitió que no hicieron «un gran partido ni mucho menos» y que hay que mejorar. «Fue trabado. No pudimos encontrar nunca el ritmo. Fue demasiado cortado, apagado. Eso, obviamente, no nos favoreció», aunque no dudó en calificar como «gran punto» el conquistado sobre la bocina. «El rival tenía un partido planteado para eso, para sacar ritmo, y nosotros entramos en ese ritmo. Siempre digo que es un deporte de contagio», subrayó. «Si te metes en ese ritmo, después es difícil generar o jugar a la velocidad que quieres. Nos metimos en ese ritmo y no pudimos salir», ahondó.
En cuanto al horario, reconoció que no le gustaba como jugador ni como entrenador. «No me gusta el horario en lo personal, trastoca todo. A las diez y media-once, los jugadores tienen que estar comiendo fideos». Pero recordó que no es excusa y que es importante adaptarse porque vienen otros dos partidos a esta hora. «Pensé en meter algunos entrenamientos en ese horario para adaptarnos mejor», añadió.
El punto sirve para mantener la distancia con los de abajo, comentó el Chacho, pensando ya en «mejorar mucho desde el juego» de cara al partido frente al Huesca, «otro rival directo, que será duro en su casa», avanzó. «Preparemos la semana de la mejor formar para tratar de hacer un buen partido. Nadie dijo que va a ser fácil», comentó incidiendo en que el objetivo pasa por «llegar a una zona de tranquilidad y buscar la salvación lo antes posible».
Recordó que las dificultades de las que siempre habla en forma de bajas van a seguir siendo impedimento de aquí a final de temporada, comenzando por las ausencias de Néstor por lesión y Tapia por sanción para el próximo partido. «No sé cuantos partidos pudimos repetir equipo, no tantas. Creo que la seguidilla de inicio y luego siempre hemos tenido dificultades de algún tipo para poder elegir a todos. No digo que haya un once fijo», comentó. Por eso, dice, aunque «el tipo con el mensaje más positivo» es él y entiende que algunos resultados entusiasmen, hay que tener en cuenta esos condicionantes.
El entrenador del Celta mantiene que la idea es «tratar de hacerlo mejor cada fin de semana; a veces sale, a veces no». Insistió en que «no fue un partido lindo», pero que fueron a buscar hasta el final y eso les trajo premio, del mismo modo que en la jornada anterior, en Mestalla, habían tenido «demasiado castigo» en la recta final.