Claudio Giráldez: «Hemos ganado la liga siendo nosotros en todos los partidos»

M. V. F. VIGO

GRADA DE RÍO

RC CELTA

El técnico del Celta de División de Honor Juvenil destaca que irán a la Copa de Campeones con el objetivo de disfrutar

19 may 2022 . Actualizado a las 11:16 h.

El Celta Juvenil de División de Honor se proclamó campeón el pasado fin de semana a falta de una jornada y con unos números de vértigo en la primera temporada al frente de Claudio Giráldez (O Porriño, 1988). El técnico se muestra orgulloso de lo conseguido y con ganas de disfrutar de lo que queda: la Copa de Campeones.

—A falta de un partido y siendo ya campeones de liga, ¿qué balance hace?

—Poco más podemos pedir. El primer objetivo colectivo era ganar la liga y lo conseguimos. Aparte, disfrutando del trayecto de la Copa del Rey, donde llegamos a la final four y vivimos muy buenos momentos. Y siempre teniendo claro que lo importante es el futuro de los chicos, que muchos entrenan con el primer equipo y con el B y están dando el nivel. Ahora toca disfrutar de lo que queda teniendo claro que los objetivos están cumplidos e ir a por todas en la Copa.

—¿De qué se siente más orgulloso de lo conseguido este curso?

—De que hayamos sido nosotros en todos los partidos, que hayamos sido fieles a nuestra manera de jugar: ser protagonistas, dominar... Creo que el fútbol que hacemos es atractivo y divertido para quien lo ve. Y somos un grupo unido, que lleva tiempo junto y la gente que se ha añadido ha sumado. También me quedo en positivo con que todos los jugadores que están en equipos superiores estén dando la talla.

—¿Podía presagiar un primer año suyo al frente del equipo como ha sido este?

—Al no conocer la categoría, es complicado tener expectativas, pero sabíamos que podíamos hacer cosas buenas porque conocía a los chicos de entrenarlos en Liga Nacional y sabía de su potencial. Lo mismo con el cuerpo técnico, que estamos muy cómodos trabajando juntos y sabíamos que eso lo iba a facilitar.

—A nivel personal, ¿qué ha supuesto esta temporada para usted?

—Es una experiencia nueva, un paso adelante en mi carrera de entrenador, que es a lo que me quiero dedicar profesionalmente. En el Celta, esto es un paso muy cercano al fútbol profesional y estoy contento de cómo me estoy encontrando, lo a gusto que me estoy sintiendo. Estoy agradecido al cuerpo técnico y al club por hacer las cosas tan fáciles.

—¿Cuáles son las claves del éxito de este equipo?

—Los equipos dependen siempre del ambiente. Es difícil que las cosas salgan si los jugadores son muy egoístas y solo piensan en ellos. Tenemos ejemplos de futbolistas que han tenido momentos muy buenos a nivel de minutos, lo han aprovechado y, cuando no han sido tan importantes en cuanto a minutos, lo han sido a nivel de grupo. Después, el nivel técnico individual es muy bueno y hemos sido capaces de involucrarnos todos y ser un grupo con una manera reconocible de jugar.

—Los resultados contestan a la pregunta de si les pesa tener a tantos jugadores entrenando con filial y primer equipo.

—Tenemos que darle la vuelta a la situación y ver lo bueno, que es mucho. Aunque los tengamos menos días, entrenan a un nivel de exigencia mayor y nos aprovechamos del ritmo competitivo que adquieren. Y teniendo en cuenta que nos conocemos mucho, es más fácil preparar un partido con menos contenido colectivo táctico durante la semana, pero con la confianza de saber lo que queremos unos de los otros.

—A base de ganar y golear, ¿llegan a tener la impresión de que apenas tienen rivales en liga más allá de Deportivo o Racing de Santander?

—Este año, con el covid, la liga es de más equipos y eso hace que el nivel de algunos baje inevitablemente. Pero hemos tenido momentos y partidos complicados que hemos sabido convertir en sencillos o sacar un resultado más abultado de lo que la realidad sobre el césped decía. El Dépor ha hecho una temporada espectacular y, con números muy buenos nuestros, nos han competido hasta la penúltima jornada; el Racing nos ganó en casa y nos lo puso difícil en su campo, como el Oviedo en los dos partidos. Nos hemos dejado puntos fuera contra equipos de media tabla e incluso de la parte baja. Hay que dar mérito al equipo, a su regularidad y ambición. Veo más mérito de los de arriba que demérito del resto.

—¿Cómo encajó el vestuario la única derrota sufrida en Liga?

—Fueron dos semanas de acumulación de partidos, con el foco puesto de manera inconsciente en la Copa que teníamos una semana después. Fueron días de mucha gente con covid, gripe... Una semana rara de entrenamientos en que se juntaron muchas cosas, nos pillaron en un momento no demasiado bueno. Nos hizo más daño la eliminación de Copa por el premio que había de la final, fue quedarse con la miel en los labios. Pero hemos sido capaces de darle la vuelta, de que el equipo vea lo meritorio de lo que hizo y disfrute jugando al fútbol, porque creo que cuando hemos disfrutado, hemos dado nuestra mejor versión. Estamos ilusionados pensando en lo que viene.

—¿Qué nombres propios destaca en la gran temporada de este Celta?

—Todo el mundo ha estado a un nivel alto; si no, es imposible llegar a donde hemos llegado. Siempre llaman la atención los que están más cerca de la portería, o gente como Tincho (Conde), que siendo lateral, ha hecho muchos goles, y Sotelo o Hugo Álvarez, que están con el primer equipo, Yoel (Lago)... Pero sin los números de Jesús (Ares); la aportación de Antañón o Penela; el nivel día a día de Meixús, Damián, Manu (Fernández), los porteros, De la Iglesia con un final muy bueno, Fer López con con una segunda vuelta brutal... Todo el mundo ha tenido sus momentos, incluso gente que ha participado menos como Rubio (Javi Labrada), Diego (Rodríguez), Javi (Rodríguez)... Podría nombrarlos a todos. Los equipos se construyen así, de la suma de niveles individuales.

—Llama la atención la aportación goleadora de Aitor Mañas, llegado en invierno.

—¡Sabía que no me iba a acordar de todos! Llegó para darnos algo que no teníamos con la baja de Compa (Álex Comparada) -que lo hemos echado de menos en muchas fases de la temporada-, igual que a Breo (Sío). Tobías (Reclusa) ha estado muy bien, y gente del B como Tato, Santos... Mañas era el delantero de referencia que nos faltaba y nos da presencia física en el área que no teníamos.

—El equipo ha tenido en Liga 23 goleadores distintos. ¿Qué le dice el dato?

—Hablamos hace poco que faltaban dos o tres y Diego (Rodríguez) metió el otro día al Pabellón. Con ficha del A solo falta Breo, que estuvo lesionado. A lo mejor puede entrar con el Pontevedra y sería bonito que pudiera hacer gol. También muchos del B que han participado han anotado. No hemos tenido un jugador de 30 goles, ha sido una suma de mucha gente y demuestra lo que decía: la unidad y que todo el mundo ha tenido su momento. Nos llena de orgullo, pero es una anécdota.

—¿Qué objetivo se marcan para la Copa de Campeones?

—Disfrutar de cada partido. Tiene mucho mérito llegar y competir contra los mejores de España. Tenemos que ser conscientes de que somos el Celta y no podemos competir en presupuesto de cantera ni en captación con la mayoría de los rivales de ese torneo. Toca vivir la experiencia y soñar es gratis. No tenemos ninguna cortapisa para mirar hacia arriba, pero lo primero es disfrutar de los cuartos.

—¿Llegará a tiempo Hugo Sotelo?

—Ya llegó muy justo a la Copa del Rey por un problema en la planta de pie y en los dedos. Estamos intentando recuperarlo para que pueda llegar a la Copa de Campeones y a ver si podemos.

—¿Les queda algún incentivo para esta última jornada de liga antes de ese torneo?

—Le daremos una vuelta para buscarlos. Queremos irnos con buena sensaciones, ganar el partido, que es el último en casa de la temporada. Daremos oportunidades a algún jugador del Juvenil B que está haciendo bien las cosas y servirá también para repartir esfuerzos y llegar todos bien al fin de semana siguiente. 

—¿Ve a muchos de sus jugadores preparados para dar el salto al B o al C Gran Peña?

—Totalmente. La gran mayoría demuestran en el día a día que están preparados para llegar al fútbol profesional. Evidentemente, es difícil dar el salto ya, pero si se confía y se les da la oportunidad, están demostrando que tienen nivel.

—Un buen puñado de sus futbolistas acaban la etapa juvenil. ¿Cómo se presenta la próxima temporada de reconstrucción -si continúa, como todo hace pensar-?

—Tengo un año más de contrato y supongo que seguiré, pero hasta que acabe la temporada, nunca sabes lo que va a pasar. Aun así, el Juvenil B ganó la liga también y hay muchos jugador de segundo año e incluso de primero que ha participado con el Juvenil A. El Celta tiene garantías de tener siempre buenos equipos.

—¿Sigue de cerca al Gran Peña, al que entrenaba la temporada pasada -ahora segundo filial del Celta-?

—Sí,y confío en que va a ascender. Lo tiene en su mano: tiene que ganar al Barbadás en Ourense y, en caso de empate, sacarlo en casa en la última jornada. Tienen nivel para ello, han hecho una temporada de menos a más y tiene jugadores que llaman a la puerta del B. Ojalá lo consigan. Por mi pasado allí, porque son del club y porque tengo muchos amigos en el cuerpo técnico.

—¿Le ha sorprendido la explosión este curso de Miguel Rodríguez en el Celta?

—No, porque lo entrené, lo conozco y sé de su potencial. Quemó etapas demasiado rápido y quizás le hacía falta tiempo en el Celta B para madurar y asentarse, porque el nivel lo tiene. No hay que tener prisa con los jugadores, hay que darles su momento. Está llamando a la puerta del primer equipo y tenemos la esperanza de que pueda llegar.

—Aún es juvenil. ¿Llegaron a plantearse que bajara para la Copa del Rey o en algún otro momento puntual?

—No soy partidario y el club tampoco. Si está jugando y rindiendo en categorías superiores, cuanto más arriba esté, mejor. Hay jugadores en el juvenil que han hecho méritos para disfrutar de estas oportunidades y Miguel es importante para el Celta B.