La venta del canterano ha causado tristeza a muchos aficionados que lamentan que el equipo pierda a un jugador de casa
08 jul 2022 . Actualizado a las 05:00 h.«Duele» es seguramente la palabra que más se repite en las publicaciones de los seguidores del Celta en redes sociales ante la noticia del adiós de Brais Méndez. Hay quienes entienden que es una buena decisión por lo que al aspecto económico se refiere y quienes no creen que esté justificado. Pero son pocos a los que no les apena que el club vigués se deshaga del mosense.
De él, aparte de agradecerle los servicios prestados y su celtismo, se habla de que ha sido infravalorado y de que «con el tiempo se pondrá en valor su figura», destacando su talento y que era un jugador de casa. Hay quien admite que lo criticó en su momento, pero que acabó ganándole. «El mayor talento de A Madroa desde Iago Aspas. No lo suficientemente valorado», dice otro aficionado.
Hay quien dice que, a falta de lo que esté por venir, este traspaso resta ilusión ante el nuevo proyecto. Y se reflexiona sobre que «un club saneado teña que desprenderse dos seus mellores xogadores». «Su marcha solo tendrá sentido si gracias a ella Luís Campos logra montar un equipo ilusionante. Otra cosa lo convertirá en un error mayúsculo», es otra de las ideas expresadas en Twitter. «Por buena operación económica que sea, estos jugadores no deberían irse nunca. Desilusión», expresa otro.
Hay quien siente ante este movimiento que «el Celta es menos Celta» y quien se queda con las ganas de que hubiera sido el sucesor de Iago Aspas. Aunque, dada su juventud, sobrevuela la idea de que pueda regresar en el futuro después de esta etapa en la que desean que le vaya bien.
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