Mil vueltas a la medular del Celta

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Rafa Benítez probó con seis dibujos, con siete hombres y ocho combinaciones diferentes en busca de la mejor opción para consolidar el centro del campo

30 oct 2023 . Actualizado a las 20:41 h.

Seis dibujos, ocho combinaciones y siete hombres utilizados en once jornadas. Esos son los fríos números de un centro del campo del Celta en el que Rafa Benítez no termina de dar con la tecla. Porque, al margen de los problemas en las dos áreas, el conjunto vigués tampoco va sobrado de calidad y de músculo en la sala de máquinas y el madrileño busca soluciones. De hecho, habló en un buen número de ocasiones de reforzar el equipo en enero y ahora está sobre la mesa el nombre del luso Xeka.

Beltrán era, hasta el viernes, el hombre de máxima confianza para el entrenador del Celta, que le dio una decena de titularidades hasta que en la pasada jornada cedió su puesto a Renato Tapia. Alrededor del de Seseña fue probando jugadores y, entre ellos, Luca de la Torre se convirtió en el más asiduo. El americano comenzó el curso en el banquillo, pero ya suma ocho titularidades y seis de ellas han sido en el doble pivote, posición que no pisó en todo el curso pasado.

Todo lo demás han sido experimentos sin continuidad. Hugo Sotelo jugó los dos primeros partidos de cara y no volvió a formar parte del once, Dotor suplió a Luca en Las Palmas, tuvo su segunda oportunidad en Girona y Tapia entró en el once por primera vez en Montilivi. Caso aparte es Bamba, que ha sido titular en los once partidos, pero su posición es mucho más volátil, ya que también puede jugar como atacante en el 5-2-3 o el 4-3-3, sistema en el que Óscar Mingueza jugó formando parte del sistema.

Porque Rafa Benítez también se está aplicando en busca del mejor dibujo para el Celta y, a estas alturas, ya ha ensayado con seis diferentes en ocho partidos. Como se esperaba, el 4-4-2 es el más utilizado. Con su dibujo predilecto comenzó y a él volvió en el último partido, además de utilizarlo con motivo de la visita del Getafe. Pero también jugó con defensa de cinco en tres dibujos diferentes (5-3-2, 5-4-1 y 5-2-3) —cinco partidos en total—; en una ocasión, montó el dibujo con un 4-3-3 y también puso en práctica el 3-4-3, una opción que parte de adelantar a los laterales en una defensa de cinco, pero que mantiene un doble pivote en el juego interior de los celestes.

En cuanto a las combinaciones, de las ocho utilizadas por el entrenador madrileño, solo repitió una. En concreto, apostó por el trivote formado por Luca de la Torre, Jonathan Bamba y Beltrán en dos ocasiones (en los partidos ante el Barcelona y el Alavés). Todo lo demás han sido movimientos de piezas en busca de una idea que no termina de fructificar. Porque la sala de máquinas no ha podido tapar las vías de agua que impiden al equipo dejar su portería a cero y, por el contrario, no han generado más fútbol para desequilibrar en ataque. De los jugadores que pasaron por el medio, solo marcaron, hasta la fecha, Mingueza y Bamba, además de Larsen, que partió de la banda derecha en el partido de Almería, el único que acabó con victoria para los célticos.