El décimo gol del delantero noruego del Celta fue uno de los goles de mayor dificultad entre los que ha marcado hasta ahora
18 dic 2023 . Actualizado a las 05:00 h.El décimo gol de Strand Larsen como futbolista del Celta fue un golazo en el que le acompañó la suerte, como el propio jugador dijo al término del partido contra el Granada en Balaídos que decantó con ese tanto.
Estaban a punto de alcanzarse los 20 minutos de partido cuando Iago Aspas puso un córner que podía haber atrapado directamente el meta visitante, André Ferreira, pero el cancerbero falló, el balón quedó suelto dentro del área y Renato Tapia, que estaba en todos los confines del campo, se hizo con él después de saltar por encima del portero, controló el balón, lo cedió atrás para Unai Núñez y, aunque el central vasco lo intentó colocar al segundo palo, la pelota impacto en la rodilla de Larsen, que no pudo tirar al primer intento.
Pero el internacional con Noruega tuvo una segunda oportunidad y, con dos defensores por detrás tapando la portería, fue cuando se sacó de la chistera el taconazo. No lo hizo de cualquier manera, sino que preparó la pierna y le dio potencia a la pelota para colocarla y mandarla para dentro. Con el portero todavía sin haber recuperado su posición y totalmente vencido, sí que tuvo que sortear a ese par de defensas que trataban de evitar el que iba a ser el único tanto del partido.
El propio jugador se mostraba feliz tras el tanto por haberlo conseguido y no ocultaba que había sido muy bueno, pero también hacía autocrítica, señalando que el primer toque no lo había sido y que había tenido «un poquito de suerte» al haber estado acertado en esa acción que fue determinante para el partido.
No obstante, fue uno de los goles de mayor dificultad que anotó el noruego desde que llegó al Celta y el primero que marcaba de tacón. Para confirmar su buen momento.
