Borja Iglesias encadena su tercera jornada consecutiva sumando y firma una gran actuación, salvando un gol y ganándoles la partida a los centrales
22 sep 2025 . Actualizado a las 00:31 h.Borja Iglesias se ha convertido en el seguro de vida del Celta en este inicio de liga. El Panda marcó tres goles en tres partidos y el equipo vigués sumó tres puntos. Así de sencillo y de difícil. Y, por el momento, es el único delantero del conjunto celeste que ha visto puerta.
El compostelano terminó el curso pasado como pichichi del equipo con once dianas. Entonces también había marcado tres goles consecutivos en el primer mes ante el Villarreal, Osasuna y Valladolid, con el mismo rédito, porque el Celta perdió los dos primeros envites y le ganó el tercero a los pucelanos. Esta campaña, marcó sus dos primeras dianas en Balaídos, saliendo del banquillo, y ayer se estrenó como goleador a domicilio y como titular.
Vallecas, peculiar por sus dimensiones, fue el patio de recreo el Panda. El delantero marcó el gol en el lance menos elaborado, a saque de córner y con el muslo, pero, además, puso a prueba a Batalla con un excelente disparo. Además, se cansó de ganarle duelos ante a Lejeune como a Pathé Ciss. Lo hizo pegándose con ellos y con su juego de espaldas que tantos espacios abre al equipo.
En esta ocasión, además, fue clave en la última acción defensiva del partido. El Panda bajó a defender un córner a favor del Rayo, el balón le cayó a Alemao en el área pequeña y el céltico fue con todo para bloquear un balón que de lo contrario hubiese terminado en el fondo de la portería y hubiese tirado por tierra todo el trabajo de los vigueses.
Con su tanto de ayer, Borja Iglesias alcanza los 69 goles (29 de ellos en la últimas cuatro ligas) en Primera División, convirtiéndose en el segundo goleador gallego en los últimos 50 años, tan solo por detrás de Iago Aspas y por delante de Joselu, según informó la cuenta de X Afouteza e corazón. Además, el céltico se coloca en lo más alto del trofeo Zarra conjuntamente con Pere Milla (Espanyol), Rafa Mir (Elche) e Iván Romero (Levante).
El próximo reto del Panda deber ser celebrar un triunfo en la liga, aunque antes de pensar en el Elche, tendrá que volver a Alemania, un país en el que se sintió muy a gusto en su semestre en el Leverkusen.