Blair apuesta por implicar a Siria e Irán en la paz iraquí, pero Bush rechaza a Teherán

Ó. Santamaría / I. Allende CORRESPONSALES | N. YORK/LONDRES

INTERNACIONAL

ERIC DRAPE

13 nov 2006 . Actualizado a las 06:00 h.

El primer ministro británico, Tony Blair, pidió anoche a los gobiernos de Irán y Siria un mayor papel en el proceso de búsqueda de una paz duradera en el Oriente Medio y muy especialmente en el conflicto de Irak. Estos dos países «pueden contribuir a una evolución pacífica de la situación creada en el Cercano y Medio Oriente en lugar de entorpecerla», indicó Blair en su discurso. Según publicó ayer el diario The Guardian , Londres cree que la Casa Blanca estaría en principio abierta a un diálogo con Siria y que el sustituto en el Pentágono de Donald Rumsfeld, Robert Gates, ve con buenos ojos la reanudación de los contactos con Irán. No obstante, George W. Bush zanjó, de momento, toda posibilidad de contactos directos con Teherán. Tras reunirse con el primer ministro israelí, Ehud Olmert, insistió en que Irán debe abandonar sus programas nucleares o enfrentará serias consecuencias. La primera, señaló, será el aislamiento internacional. El papel de Olmert era precisamente asegurarse de que Bush no se ablandará. Horas antes, Bush se reunió con el Grupo de Estudios de Irak, presidido por el ex secretario de Estado James Baker (republicano) y el congresista Lee Hamilton (demócrata), que antes de fin de año tiene previsto presentar un informe sobre la situación en el país árabe, además de consejos para una salida al conflicto. El Grupo no adelantó al mandatario el contenido del esperado informe, según dijo Bush -presionado por los demócratas para cambiar el curso del conflicto en Irak, , ni éste quiso opinar sobre las posibles opciones que pueden plantear porque no quiere «perjudicarlos». Según diversas fuentes, una de las conclusiones del informe será la necesidad de involucrar a Siria e Irán -integrantes del eje del mal dibujado por Bush- en la búsqueda de la paz en Irak y Oriente Medio, una propuesta que respaldan los demócratas. Irán, régimen con el que Washington no tiene relaciones diplomáticas de 1979, aseguró que «si ellos (Estados Unidos) verdaderamente quieren sostener negociaciones, deberían proponerlo de forma oficial y luego nosotros lo revisaríamos», dijo el portavoz de Exteriores, Mohamed Alí Hossein. El embajador sirio en Washington Imad Moustapha aseguró que su país está deseando jugar «un papel constructivo» en la zona.