Obama apuntilla la campaña con una gran ofensiva en televisión

Tatiana López

INTERNACIONAL

El demócrata incluye en horario de máxima audiencia un anuncio cuyo coste supera los tres millones de dólares

30 oct 2008 . Actualizado a las 14:11 h.

Barack Obama apareció anoche en los salones de millones de estadounidenses para convencerlos de que él debe ocupar la Casa Blanca. Este asalto televisivo en horario de máxima audiencia y con un coste sobrepasa los tres millones de dólares, solo tiene un precedente que se remonta a 1992, cuando el multimillonario tejano Ross Perot, hizo algo similar y logró robarle votos a Bush padre aunque no le sirvieron para ganar.

El anuncio -de media hora y producido por Davis Guggenheim, oscarizado por el documental de Al Gore- cuenta la historia de cuatro familias representativas cada una de un problema especifico, intercaladas con mensajes de un Obama con aspecto de presidente junto a la bandera estadounidense. Su emisión coincide con el aniversario del Martes Negro de 1929 (el crac que inicio la Gran Depresión), en una clara referencia a los malos tiempos económicos. Aunque centrado en la economía, la publicidad trata la educación o la reforma de la seguridad social, para lo cual Obama cuenta ante la cámara la experiencia de su madre muerta por culpa de un cáncer.

El spot se divulgó en tres de las cuatro cadenas en abierto, CBS, NBC y Fox, y al menos en cuatro por cable, entre ellas la hispana Univision, donde se emite una versión en español, un reflejo de la importancia del voto latino.

A razón de un millón de dólares ha recibido cada una de las tres cadenas nacionales, y una cifra mucho menor las cuatro de cable. El Campaign Media Analysis Group, que analiza la publicidad electoral, calcula que el coste rondará los 5 millones de dólares (3,8 millones de euros). A la espera de la influencia que tendrá en los votantes, el anuncio pone de relevancia la superioridad financiera de Obama, que va camino de gastar 250 millones en publicidad desde junio, superando el gasto en ese período de McDonald's o Wal-Mart. McCain tuvo que conformarse anoche con aparecer en el show de Larry King Live .

Bill Clinton, en Florida

Obama y McCain gastaban ayer sus últimos cartuchos tratando de hacerse con los 27 votos electorales de Florida, convertido en verdadero campo de batalla en estas elecciones. El demócrata tenía previsto comparecer en la noche local (madrugada en España) en Sunrise junto a Bill Clinton. La capacidad del ex presidente para apelar al voto obrero podría contrarrestar el efecto causado por Joe el fontanero. Este icono de la clase media estadounidense ejerce ahora de telonero de los republicanos y lanzando acusaciones de que Obama es «un socialista» y promueve políticas «que supondrían la muerte de Israel».

El fontanero es el último recurso de McCain, cuyos malos datos en las encuestas podría haber llevado a algunos de sus colegas de partido a pedirle que centre sus esfuerzos en las elecciones al Congreso, en vez de luchar por una presidencia que muchos dan ya por perdida.