¿El epitafio del faraón?

INTERNACIONAL

01 feb 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Hosni Mubarak parece sentenciado. Si el domingo fue Mohamed el Baradei quien proclamó en el corazón de la protesta, la plaza Tahrir, que no había marcha atrás en Egipto, ayer fue el Ejército el que puede haber puesto el epitafio al régimen del presidente-faraón al reconocer como legítimas las demandas de los miles de egipcios que llenan estos días las calles y descartar convertirse en represor de la libertad de expresión de un pueblo. La marcha de un millón y la huelga general son una bomba de relojería que puede hacer saltar por los aires la poltrona sobre la que Mubarak se ha sentado durante treinta años. Pero si no es hoy, será pronto, a tenor de cómo hablan ya en pasado del veterano mandatario egipcio los dirigentes israelíes.