Los activistas cifran en más de 70 los muertos, entre ellos 18 recién nacidos que perecieron en el hospital durante un corte de electricidad
09 feb 2012 . Actualizado a las 07:00 h.Bachar al Asad no cambió el guion que sigue desde el inicio de las protestas: un día después de prometer a Rusia frenar la violencia optó por quebrar la moral de los insurgentes endureciendo la operación de castigo sobre la sitiada Homs. Los informes de opositores que llegaron de ese bastión rebelde hablan del terror que sufren los civiles: más de 70 muertos, entre ellos 18 recién nacidos, y cientos de heridos en medio de intensos bombardeos. La alta comisaria de la ONU para los Derechos Humanos, Navi Pillay, pidió una acción internacional urgente para proteger a los civiles, tras mostrarse horrorizada por los ataques indiscriminados.
«Es una auténtica guerra. Todas las líneas telefónicas están cortadas. La gente muere a causa de las heridas dentro de sus casas», dijo el soldado desertor Omar Homsi con el estruendo de las explosiones de fondo. En declaraciones a Al Yazira señaló que el Ejército está lanzando cohetes Grad contra barrios residenciales. Las brigadas rebeldes, explicó, no puede tomar represalias porque no tienen capacidad para hacerles frente ni tan siquiera localizar sus puntos de lanzamiento ya que están demasiado lejos.
«Algunas áreas están completamente sitiadas», declaró por su parte la activista Hadi al Abdallah a Al Yazira. Mohamad Hasán, otro activista, afirmó que el bombardeo se intensificó al amanecer sobre los barrios suníes de Bab Amr, Bayada, Khalidiyeh y Wadi al Arab. En Bab Amr, al menos 23 edificios quedaron totalmente destruidos. A media tarde los tanques se adentraban en sus calles.
Rami Abdel Rahman, del Observatorio para los Derechos Humanos Sirios, aseguró que veinte miembros de tres familias enteras fueron masacrados en sus casas por los shabiha (matones). Los opositores informaron de que 18 bebés prematuros murieron en el hospital de Al Walid al dejar de funcionar las incubadoras durante un corte de electricidad.
El Gobierno negó esta información y aseguró que los hospitales de Homs funcionan con normalidad. No opina lo mismo Médicos Sin Fronteras, que denunció en París que los heridos y los médicos son perseguidos y corren el riesgo de ser detenidos y torturados en los hospitales.
Fusiles de Israel y EE.?UU.
Los medios estatales insisten un día más en que Homs sufre el ataque de «grupos terroristas», que hicieron estallar ayer un coche bomba y atacaron con misiles una refinería. Además informó del hallazgo de fusiles y misiles procedentes de Israel y Estados Unidos, según Efe.
Vladimir Putin alertó contra toda injerencia externa en el conflicto sirio y pidió a árabes y occidentales «que no se comporten como un elefante en una cacharrería». Aunque condenó toda forma de violencia, el primer ministro ruso señaló que «es necesario dejar que los sirios decidan su propia suerte». «Hoy nadie habla de lo que está pasando en Sirte y otras ciudades que apoyaron a Gadafi», argumentó.
Los activistas acusan al Ejército de bombardear viviendas con cohetes Grad