Birmania estrena democracia de la mano de Suu Kyi

Hla Hla Htay RANGÚN / AFP

INTERNACIONAL

Soe Zeya Tun / Reuters

La opositora insta a votar mañana, pese a reconocer irregularidades

31 mar 2012 . Actualizado a las 06:59 h.

Más de veinte años después de que le robaran la victoria electoral a su partido, la opositora birmana y premio nobel de la paz Aung San Suu Kyi tratará mañana de obtener un escaño de diputada y regresar al primer plano de la política de su país.

Un total de 45 escaños están en disputa en estas legislativas parciales. La Liga Nacional por la Democracia (LND), la formación de Suu Kyi, se postula a 44 de ellos. Pero la atención estará centrada en la circunscripción rural de Kawhmu, cerca de Rangún, donde la nobel se somete al veredicto de las urnas por primera vez en su vida.

Occidente sigue atentamente estas elecciones. Después de haber aislado a la Junta Militar durante décadas y de haberla sometido a sanciones económicas, apoya ahora la transición democrática puesta en marcha por el nuevo Gobierno. En 1990, la LND fue despojada de la victoria por los militares, después de ordenar un año antes el arresto domiciliario de la hija del héroe de la independencia, Aung San. En el 2010, la opositora seguía vigilada en su residencia, mientras su partido boicoteaba las elecciones, desacreditando un proceso marcado por las irregularidades.

«Ni libres ni justas»

En un conferencia de prensa ayer en Rangún, Suu Kyi reconoció que las elecciones de mañana serán imperfectas, pero reivindicó la necesidad de participar en ellas. «No creo que podamos decir que se trata de unas elecciones libres y justas», indicó. Pero agregó: «Estamos a favor de una verdadera reconciliación. Por lo tanto, vamos a tratar de tolerar lo que sucede».

La nobel de la paz denunció casos de intimidación y vandalismo contra sus partidarios, así como los cientos de nombres de fallecidos incluidos en el censo y la desaparición de este de más de 1.300 electores.

El poder ha estado en manos de los generales desde 1990 hasta mayo del 2011, fecha en que se replegaron tras un Gobierno de aspecto civil que ha sorprendido al mundo con un amplio programa de reformas. Numerosos prisioneros políticos han sido liberados y en agosto pasado Suu Kyi fue invitada por el presidente Thein Sein a regresar a la política. La opositora, de 66 años, ha pasado de su estatuto de prisionera a aparecer como la figura tutelar de la oposición y candidata a diputada, con la bendición de sus antiguos enemigos.

En las últimas semanas, la Dama, como se le conoce, ha recorrido el país a lo largo y ancho, aportando su carisma a candidatos de la LND a veces sin experiencia y a menudo enfrentados a figuras locales de peso, sobre todo en las zonas étnicas.

La prudencia domina en un país que sale de 50 años de dictadura militar. Los opositores afirman que quedan prisioneros políticos. Y el optimismo no es compartido en los confines del país, donde algunas minorías étnicas -un tercio de la población- siguen contestando la autoridad de Rangún. A pesar de todo, las elecciones siguen siendo una esperanza mayor.