Samaras promete bajar impuestos y subir las pensiones para ganar las elecciones griegas

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

INTERNACIONAL

Estras promesas parecen estar hechas de espaldas a la dura realidad

11 ene 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Las promesas electorales del líder de Nueva Democracia, el primer ministro Antonis Samaras, parecen hechas de espaldas a la dura realidad a la que se tendría que enfrentar si finalmente vence el 25 de enero en las urnas: la negociación con la troika del último tramo del rescate, que exigirá otra dosis de austeridad a sus compatriotas.

«No habrá más recortes en las pensiones ni en los sueldos», aseguró en un mitin que ofreció en un céntrico hotel de Atenas. «La próxima parada en nuestro plan de crecimiento incluye reducir los impuestos a todo el mundo, lo que puede ocurrir gradualmente, paso a paso», añadió. «Ahora volvemos al crecimiento y es el momento de aumentar los salarios y las pensiones: aumentos progresivos, pero aumentos», aseguró el candidato conservador.

Lo inconcreto de su anuncio -solo precisó reducir el tipo impositivo máximo del IRPF del 42 al 33 % y el de sociedades del 26 al 15 %- invita a pensar que son solo pomposas promesas electorales que introdujo en su estrategia para tratar de adelantar a la izquierda.

En Europa y sin populismos

Sin mencionar explícitamente a su rival Alexis Tsipras (Syriza), que camina, según distintos sondeos, entre 4,1 y 2,7 puntos por delante de él en la intención de voto de los griegos, Samaras aseguró que solo «un Gobierno responsable» puede solucionar la crisis griega «sin enfrentarse» a Europa. «Queremos el futuro en las manos de los griegos. Otros quieren una economía de Estado. Nosotros queremos que los griegos puedan invertir liberados de un Estado corrupto. Ellos quieren repetir lo que nos llevó a la quiebra», afirmó.

El líder conservador volvió a enarbolar la bandera de la permanencia en Europa para distanciarse del peligro de que una Grecia gobernada por el «populismo» salga del euro si gana su rival.