El proeuropeo Vucic revalida su mayoría absoluta en las parlamentarias serbias

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

INTERNACIONAL

Las primeras proyecciones le otorgan un 52,6 % de los votos frente al 12,9 de los socialistas y el 7,4 de los radicales

25 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El primer ministro proeuropeo Aleksandar Vucic logró ayer una amplia victoria en las legislativas anticipadas serbias con más de la mitad de los votos, de acuerdo con proyecciones del grupo independiente CESID.

El Partido Progresista (SNS, centroderecha) de Vucic logra un 52,6 % de los votos, más de lo previsto por las encuestas previas a los comicios, frente al 12,9 % de los socialistas, socios de la coalición de Gobierno en funciones, y el 7,4 % del Partido Radical, de extrema derecha y liderado por el controvertido político extremista Vojislav Seselj, con lo que volvería así al Parlamento nacional tras unos años de ausencia.

Si los radicales llegaran a lograr un tercio de los escaños de la Cámara legislativa, podrían impedir que el Gobierno apruebe una reforma de la Constitución, un aspecto clave toda vez que la Carta Magna mantiene la referencia a Kosovo como parte del territorio serbio.

Seselj fue absuelto de crímenes de guerra por el Tribunal Penal Internacional para la Antigua Yugoslavia (TPIY) a finales de marzo, una decisión que ha sido recurrida por los fiscales y que ha causado conmoción a las víctimas de la guerra en Bosnia y Herzegovina y en Croacia.

Debacle

El Partido Democrático (DS), de centroderecha, que fue durante años el más votado y que dirigió el acercamiento de Serbia a Europa, alcanzó según esta primera proyección un 5,7 %, suficiente para entrar en la Cámara.

Aleksandar Vucic, primer ministro desde hace dos años, convocó estas elecciones anticipadas -las terceras en cuatro años- explicando que necesitaba un mandato claro para proseguir con las reformas necesarias en el camino de Serbia a la adhesión al bloque europeo. Pero sus opositores interpretaron estas elecciones como un intento por consolidar su poder, y expresaron su preocupación por sus supuestas tendencias autoritarias.

«El futuro de Serbia depende de estas elecciones. No vamos a permitir un retorno a los años oscuros que creíamos estaban ya lejos», había dicho Vucic ante una multitud en su último mitin en Belgrado.

Escoger el pasado significaría que Serbia «volvería a ser un leproso en Europa», estimó Vucic en declaraciones a un canal local el jueves, en referencia al aislamiento de Serbia durante el régimen de Slobodan Milosevic en la década de los noventa.

Vucic, otrora aliado de Milosevic, es ahora un proeuropeo reformista que espera llevar a Serbia, un país de 7 millones de habitantes, a la Unión Europea. Al igual que el presidente del país, Tomislav Nikolic, formó parte del Partido Radical de Seselj y lo abandonó para crear el Partido Progresista.

La popularidad de Vucic no se vio afectada a pesar de que en los dos años que lleva en el poder ha emprendido una política de austeridad, con recortes de pensiones y salarios, al argumentar que esa medidas eran necesarias para sortear y superar la crisis financiera.

Desde la oposición se le acusa de un estilo de gobierno autoritario y de amordazar a los medios.