Los Verdes se postulan como dique frente al tsunami ultraderechista
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INTERNACIONAL

Los sondeos otorgan a los ecologistas 55 escaños en la Eurocámara, frente a los 50 actuales
23 may 2019 . Actualizado a las 05:00 h.El domingo asistiremos a la mayor fragmentación de la historia del Parlamento Europeo. La epidemia que recorre todos los países de la UE -el descenso a los infiernos de los tradicionales partidos populares y socialdemócratas- va a traspasar holgadamente el umbral de la Cámara. Y lo hará para quedarse bajo la forma de una nube de siglas polarizadas hacia los extremos, desde los radicales de izquierdas y secesionistas varios hasta los ultraderechistas que han hecho de la eurofobia el mantra de su campaña.
En medio de esta maraña surge con vigor una alternativa: Los Verdes. Este grupo -que lideran la alemana Ska Keller y el holandés Bas Eickhout- tiene actualmente 50 escaños en un hemiciclo con 751 eurodiputados, pero las encuestas que se barajan en los despachos de Bruselas estiman que subirán hasta los 55 parlamentarios, cinco asientos que en un principio arañarían a los partidos de centroizquierda.
La distribución proporcional de plazas perjudica en este caso a la formación ecologista, ya que al obtener más votos en países muy poblados, como Alemania o Francia, su peso relativo en la Cámara se verá amortiguado.
Los Verdes se postulan como un dique de contención frente al tsunami ultraderechista liderado Marine Le Pen en Francia, Víktor Orbán en Hungría, Matteo Salvini en Italia o el irredento Nigel Farage en el Reino Unido, que al frente de su Partido del Brexit quiere volver a la Cámara para destruir las instituciones europeas «desde dentro».
Extraños compañeros de viaje
Sin embargo, aunque Los Verdes se presentan como un partido progresista, defensor del ecologismo, los derechos de los inmigrantes y la recuperación del Estado de bienestar diezmado por la Gran Recesión, la alianza The Greens/EFA acoge dentro de sus siglas a unos extraños compañeros de viaje para los defensores del medio ambiente. Porque bajo el paraguas de la EFA se cobijan siglas variopintas: desde formaciones nacionalistas (o directamente independentistas) de toda Europa al Partido Pirata alemán o la lista de los Granjeros Lituanos. El grupo reclama el «derecho de autodeterminación» y la EFA se define a sí misma como una coalición formada «por parlamentarios que representan a naciones europeas sin Estado, regiones y minorías».
Durante la legislatura que ahora llega a su fin han desfilado por sus escaños eurodiputados de Galicia (Ana Miranda, del BNG) o Cataluña (Ernest Urtasun, de Iniciativa per Catalunya Verds).
En España, triple candidatura
En España, que en los comicios del 2014 aportó el 10 % de los votos a Los Verdes, la formación se presenta junto a Unidas Podemos e ICV, dentro de un conglomerado de siglas en el que también figura Catalunya en Comú.
Esta es la «candidatura oficial» del ecologismo español para el 26M. Pero no será la única, porque esgrimiendo el mismo color concurren también Coalición Verde-Europa Ciudadana y Recortes Cero-Los Verdes-Grupo Verde Europeo.