El partido de Merkel ratifica su negativa a cualquier pacto con los populistas de ultraderecha
INTERNACIONAL
«Nosotros diferenciamos entre conservadores y reaccionarios», defiende el secretario general de la CDU
16 jun 2019 . Actualizado a las 14:21 h.La Unión Cristianodemócrata (CDU) alemana, el partido de la canciller Angela Merkel, ratificó este domingo su categórico rechazo a toda colaboración con la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) e insistió en que no existirá «nunca» tal cooperación.
«Nosotros en la CDU diferenciamos entre conservadores y reaccionarios, entre intereses legítimos del ciudadano y propaganda nacionalista», escribió en su cuenta en twitter el secretario general del partido, Paul Ziemiak. La CDU «nunca van a cooperar» con la AfD, prosigue el mensaje, para insistir en que su partido es «una fuerza conservadora».
Ziemiak, exlíder de las juventudes de la CDU, está identificado con el ala más derechista del partido y asumió su secretaría general el pasado diciembre, al ser elegida como nueva jefa de la formación Annegret Kramp-Karrenbauer, tras 18 años bajo el liderazgo de Merkel.
El secretario general de la CDU sale así al paso a unas declaraciones del exjefe de los servicios secretos alemanes, Hans-Georg Maassen, según el cual, no puede descartarse la perspectiva de que la CDU y la AfD acaben cooperando en el este del país. Maassen, miembro de la CDU, fue relevado como jefe del espionaje de Interior por sus supuestas cercanías con la AFD el año pasado, tras un largo tira y afloja entre el bloque conservador de Merkel y sus socios socialdemócratas.
Las tensiones en la coalición de Gobierno escalaron a raíz de unas declaraciones de Maassen en que cuestionaba las «cacerías de extranjeros» registrados en Chemnitz, en el este del país, tras la muerte de un ciudadano presuntamente acuchillado por un refugiado sirio. Chemnitz, como buena parte del Land de Sajonia, está considerado un bastión de la ultraderecha.
Los sondeos apuntan a un fuerte empuje de la AfD en los comicios regionales que se celebrarán entre septiembre y octubre en los estados federados de Sajonia, Brandeburgo y Turingia, todos ellos situados en el este, con posibilidades incluso de erigirse en primera fuerza.
Esta situación coincide con los pronósticos a la baja a escala de toda Alemania tanto para el bloque conservador de Merkel como para sus socios de gobierno socialdemócrata. Un sondeo semanal situaba este sábado a los conservadoresclaramente por debajo de los Verdes en intención de voto, con un 27 % para los ecologistas frente al 24 % para las filas de Merkel, mientras que los socialdemócratas quedarían en un 11 %, por detrás de la AfD, con un 13 %.
La formación ultraderechista, tercera fuerza en el Bundestag (Parlamento federal) y con escaños en todos los estados federados del país, aspira hoy a lograr su primera alcaldía en Görlitz, ciudad de 56.000 habitantes fronteriza con Polonia. El candidato de la AfD, Sebastian Wippel, fue el más votado en la primera ronda de las municipales, con un 36,4 %, y se enfrenta al de la CDU Octavian Ursu, que obtuvo un 30,3 % y al que respaldan ahora el resto de formaciones, incluidos Verdes e Izquierda.