La sucesora de Merkel asume Defensa en lugar de Von der Leyen y pide un 1,5 % más de dinero para el 2024
INTERNACIONAL
Annegret Kramp-Karrenbauer se propone mejorar las necesidades del Ejército alemán
25 jul 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Ya es oficial. La delfina de Angela Merkel y potencial candidata a sucederla como canciller previsiblemente al finalizar la legislatura, en el 2021, juró ayer como ministra alemana de Defensa. La conservadora Annegret Kramp-Karrenbauer, conocida como AKK, tomó posesión del cargo en una sesión especial del Bundestag a la que fueron convocados los 709 parlamentarios germanos, que interrumpieron sus vacaciones. Algo muy criticado por la oposición, que no entiende que el juramento no se hiciera en convocatoria ordinaria en septiembre.
Pero en realidad AKK asumió el Ministerio de Defensa la semana pasada, después de que su predecesora, Ursula von der Leyen, fuera elegida presidenta de la Comisión Europea, mientras que la discusión en torno a la toma de posesión no es más que la punta del iceberg. Su nombramiento por parte de Merkel, que pilló a todos por sorpresa, responde a una estrategia de la canciller alemana para brindar más protagonismo, así como un nuevo canal para expresarse, a su sucesora, cuya popularidad cae en picado.
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La insípida licenciada en Derecho y Políticas de 56 años no ha hecho más que meter la pata desde que se convirtió en líder de la CDU en diciembre. De ahí la necesidad de darle una última oportunidad a AKK, incluyéndola en un Gobierno de gran coalición que se tambalea y podría romperse este invierno, cuando el SPD deberá decidir si le compensa mantener la alianza que tanto lo ha desgastado. Sin embargo se trata de un reto mayúsculo, pues la cartera de Defensa es una de los más complicadas, y se define por la escasez y los fiascos de las últimas décadas.
«Nuestros soldados deberán contar con el mejor equipamiento, al igual que una flota de barcos y aviones en perfecto estado, no como la actual», reconoció en su discurso de investidura AKK, que prometió presentar un plan factible para modernizar el obsoleto departamento tras la pausa estival, y pidió que se destine el 1,5 % del PIB alemán a Defensa en el 2024. «Después de 25 años de ahorro hemos reaccionado», dijo. «Su predecesora le ha dejado mucho trabajo por hacer», le recordó el jefe interino de la fracción del SPD, Rolf Mützenich.
Más allá de las denuncias de los soldados por la falta de mano de obra, los uniformes raídos, y los fallos de sus cazas y aviones de combate, la Bundeswehr también se ha visto implicada en escándalos relacionados con neonazis en sus filas. «En el Ejército germano no hay lugar para ultraderechistas», defendió ayer AKK.