California, un bastión demócrata que apuesta por el medio ambiente
INTERNACIONAL
La defensa de las medidas ecológicas podrían hacer perder votos a Biden en otros estados claves que viven de los combustibles fósiles
25 oct 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Ciudades teñidas de rojo. Tornados de fuego a 200 kilómetros por hora. Más de 1,6 millones de hectáreas calcinadas. California ha vivido en los últimos meses cuatro de los cinco mayores incendios de su historia moderna. Un desastre ambiental y social, que no está siendo especialmente tratado en la campaña electoral, pero que podría afectar el voto de estados claves.
California es el estado más poblado y más rico del país -sería la quinta economía del mundo, si fuese independiente- y, además, es profundamente demócrata, aunque fuese gobernado por Arnold Schwarzenegger, un republicano, eso sí un outsider, entre el 2003 y el 2011. Ningún candidato conservador se ha impuesto allí desde George H. W. Bush, en 1988. Su hijo obtuvo la mayor cantidad de votos en las últimas tres décadas, en el 2004, contando un insuficiente 44 % de los sufragios. Donald Trump perdió hace cuatro años contra Hillary Clinton por más de 30 puntos. Y no parece haberlo olvidado.
Los recientes incendios han ampliado la brecha entre las autoridades del estado y la Administración central.
El equipo del gobernador demócrata, Gavin Newson, culpa al cambio climático del desastre ambiental que vive California, mientras el Gobierno federal, capitaneado por el magnate, cree que el motivo de los incendios es una mala administración de los parques por parte del Ejecutivo local, y descarta el efecto de la contaminación en el medio ambiente.
«Empezará a enfriarse, solo observen», dijo Trump, cuando visitó la zona el pasado septiembre, tras ser cuestionado por el cambio climático.
El magnate retiró a su país del Acuerdo de París sobre el clima en el 2019, y también ha evitado que California continuase aprobando medidas ambientales contra las emisiones más restrictivas, una política que ha sido apoyada en la historia reciente, también por republicanos como Schwarzenegger que, eso sí, considera «falso» el nuevo pacto climático que promociona el ala más progresista del Partido Demócrata, con Kamala Harris, candidata a la vicepresidenta, como una de sus principales valedoras.
El gobernador Newson ha presionado, prohibiendo la venta de vehículos con motor de gasolina a partir del 2015, firmando, incluso, un acuerdo con las compañías que construyen el 30 % de los coches más vendidos en el estado. Deberán cumplir los objetivos.
El movimiento, que granjería popularidad a Newson en un estado que está mayoritariamente a favor de medidas contra las emisiones, podría, en cambio, suponer una pérdida de votos a Joe Biden en Pensilvania, Míchigan y Ohio, tres estados clave para convertirse en presidente, donde el negocio en torno a las energías fósiles es muy relevante. Parte de los trabajadores de las empresas del sector podrían darle su espalda a los demócratas si consideran que sus puestos de trabajo están en riesgo.
«La gente está huyendo de California. Impuestos muy altos, crimen muy alto, muchos apagones, confinamientos muy severos. Votad por Trump, ¡¡¡Qué demonios tenéis que perder!!!», escribió la semana pasada el magnate en su cuenta personal de Twitter.
Su campaña en California sufrió un golpe en agosto, cuando Miles Taylor, un antiguo alto funcionario de la Administración Trump, que ahora apoya a Biden, dijo que las decisiones del magnate con respecto al otorgamiento de fondos de emergencia para el estado eran políticas.
«Nos dijo que no le diésemos dinero a gente cuyas casas se habían quemado por un incendio porque le enfadaba mucho que la gente de California no le hubiese apoyado y que políticamente no eran una base para él», señaló, en un vídeo de campaña. Días después, Trump se desdijo, y apoyó un paquete de medidas para paliar los efectos de los incendios en California, horas después de que varios de sus asesores explicaran las causas para no desbloquear esos fondos. Tomó la decisión tras hablar con el gobernador Newson y con representantes de ambos partidos. Un entendimiento inusual durante las últimas semanas.