Los talibanes recuperan terreno a medida que los soldados se marchan
27 may 2021 . Actualizado a las 19:02 h.Las tropas estadounidenses finalizarán su retirada de Afganistán a mediados de julio, dos meses antes de la simbólica fecha prevista por la Casa Blanca, el 11 de septiembre, cuando se cumplen veinte años de los atentados terroristas contra las Torres Gemelas. El Pentágono quiere que sus soldados abandonen el país asiático al mismo tiempo que el resto de tropas de la OTAN, según informó el diario The New York Times.
Este adelanto de la marcha deja menos tiempo a Estados Unidos para lidiar con los problemas de seguridad de la zona como la amenaza de los grupos extremistas. «Retirar fuerzas es un tipo de operación muy delicada que conlleva riesgos, hay muchas cosas en las que tienen que trabajar antes de que la última persona suba al avión, sobre todo cuando hay aliados en tierra que heredan lo que dejamos atrás», dijo Michèle A. Flournoy, subsecretaria de Defensa durante la Administración Obama.
Desde que comenzaron a abandonar el país a principios de mayo, los combatientes talibanes han recuperado al menos 26 puestos de avanzada y bases en las provincias de Laghman, Baghlan, Wardak y Ghazni, al este, norte y oeste de Kabul, después de que las fuerzas del Gobierno se hayan rendido en las negociaciones con los insurgentes. Sin disparar ni un solo tiro, los talibanes han asegurado un territorio estratégico y aprovechan cada rendición como una victoria propagandística.
Las amenazas se extienden los países colindantes como Pakistán, Tayikistán y Uzbekistán, donde las milicias terroristas han advertido con posibles represalias si permiten que EE.UU, use su territorio para operaciones militares y de contraterrorismo una vez se marchen.
La futura influencia de Washington en la zona sigue siendo una incógnita. La Administración Biden no ha revelado si tiene planes para mantener su presencia en el sudeste de Asia.
La decisión de adelantar la salida se produce en contra de la opinión de los asesores militares que recomendaban mantener una presencia residual para ayudar los militares afganos a controlar la expansión de los talibanes.
El objetivo primordial del presidente Biden es acabar con la guerra más larga de su historia, iniciada por el republicano George W. Bush poco después de los ataques del 11S.
En este momento, la cifra oficial de soldados estadounidenses en Afganistán es de más de 3.000, junto con los 7.000 militares de la OTAN, que ya han comenzado la retirada. Los últimos 24 militares españoles que quedaban regresaron a principios de mayo.