El francotirador que dieron por muerto a los 20 minutos de llegar a Ucrania vive: «Fui el último en enterarme de mi muerte»

La Voz REDACCIÓN

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La fotografía que compartió Wali en la cuenta de Facebook La Torche et l'Épée - The Torch and Sword
La fotografía que compartió Wali en la cuenta de Facebook La Torche et l'Épée - The Torch and Sword

El exmilitar canadiense, que emplea el seudónimo Wali, compartió una foto sosteniendo un arma en una piscina de bolas

27 mar 2022 . Actualizado a las 09:46 h.

Entró en Ucrania como una estrella, considerado uno de los mejores francotiradores del planeta tras prestar servicio en dos ocasiones en Afganistán, Siria e Irak para el Ejército canadiense. En su hoja de servicios, el récord de número de muertes a mayor distancia (3,54 kilómetros) y 40 abatidos en un solo día. Una vez en Mariúpol, pasados solo veinte minutos desde su llegada, Wali [se identifica solo con su apodo por seguridad] perdió la vida. O, al menos, así lo difundieron medios rusos y bots en redes sociales la semana pasada.

El experimentado francotirador habría cometido un error de novato, revelando su ubicación y facilitando a los soldados del Kremlin el ataque a su posición. Moscú rebajó valor al héroe con expediente inmaculado: no aguantó ni media hora a su artillería. Pero nada de eso.

«He sido el último en enterarme de mi muerte», ironizó el soldado este martes en una entrevista a la cadena CBS News, dos semanas después de que este mismo medio informase sobre su entrada en Ucrania y, por tanto, del día en el que habría sido abatido por el fuego ruso. «Estoy vivo, ni un solo rasguño», continuó Wali, que incluso negó haber pisado Mariúpol en su vida. Por ahora dice que no ha matado a ningún soldado ruso, ya que «el trabajo de un francotirador es hacer mucha observación». La desinformación partió también desde el lado ucraniano, que poco después de que se difundiesen noticias sobre su muerte, se indicó que había abatido ya a once soldados enemigos.

En lo suyo dice ser bueno, pero rebaja la etiqueta de estrella que le había colgado Rusia: «Soy bueno, ni más ni menos». En estos días, según contó a la cadena canadiense, ha sentido «cientos de misiles» volando a su alrededor. Y, para los rusos, lanzó un mensaje de advertencia: «No es tan fácil encontrarme».

En una piscina de bolas

Wali compartió una foto en Facebook tirado sobre una piscina de bolas y sosteniendo un rifle de plástico y metacrilato. Lo hizo en la cuenta La Torche et l'Épée (la antorcha y la espada, en español), que según el medio canadiense National Post gestiona el francotirador. En la publicación saludó a las más de 42.000 personas que le siguen y escribió que «los rumores» de que había muerto en combate «fueron completamente ridículos».

El canadiense se burló también de los rumores sobre el error que cometió para desvelar su posición: «Como prueba, aquí estoy en la posición de un súper francotirador táctico, un comando guerrero de las fuerzas especiales, en un parque de bolas». Frente a la desinformación del Kremlin, Wali responde que su patrulla «ganó terreno al enemigo además de causarle pérdidas». «Lamentablemente nosotros también perdimos a camaradas, con muertos y heridos», añadió.

Mientras continúa estudiando la zona, Wali criticó en su publicación en Facebook que los rusos «temen el combate cuerpo a cuerpo» y «prefieren bombardear una y otra vez, destruyendo casas como matones frustrados».

El de Wali fue uno más de los fakes lanzado por el Kremlin. El tabloide ucraniano Segodnya, de lengua rusa, emitió un vídeo donde el presidente Volodímir Zelenski aparece pidiendo a los ciudadanos y militares de su país que depongan las armas y permitan el avance de las tropas de Moscú. En un comunicado, el medio acusó a «hackers enemigos» de publicar el vídeo en su web. «Nadie se va a rendir», reivindicaron.