La policía argentina daña la principal prueba al deteriorar el teléfono del agresor de Kirchner
INTERNACIONAL
La negligente actuación de los agentes que investigan el caso rodea de nuevas sombras el atentado contra la vicepresidenta argentina
14 oct 2022 . Actualizado a las 11:34 h.La sombra de la duda sobrevuela sobre el fallido atentado contra Cristina Fernández de Kirchner. Si ya las facilidades que se encontró su agresor, Fernando Andrés Sabag Montiel, para llegar hasta la vicepresidenta argentina levantaron sospechas, estas se incrementaron este domingo cuando se conoció que fuentes judiciales habían informado de que el teléfono móvil del atacante habría resultado deteriorado durante los intentos de la Policía Federal para extraer la información que contenía. La considerada «prueba fundamental» del caso corre riesgo de perderse, según pudo saber la agencia Télam.
El terminal que llevaba Sabag Montiel la noche en la que intentó disparar a Kirchner en la cabeza cuando estaba frente a su casa habría sido formateado, por lo que la Justicia podría haber perdido una prueba clave. Según los medios locales, en la pantalla del móvil habría aparecido el mensaje «teléfono reseteado de fábrica». La Policía Federal ha pedido a la Policía de Seguridad Aeroportuaria que investigue el dispositivo debido a que poseen un software más moderno con el objetivo de tratar de acceder a la información.
Cadena de custodia
Este inconveniente mantiene en vilo a los investigadores, aunque desde el juzgado a cargo encabezado por la magistrada María Eugenia Capuchetti se ha manifestado confianza en que la cadena de custodia no fue vulnerada. Además, las autoridades han descartado que el teléfono haya sido manipulado de forma remota, ya que «permaneció en modo avión», recoge la prensa argentina.
La jueza Capuchetti tenía muchas esperanzas en la información que los peritos pudieran sacar del móvil, ya que podría determinarse si el agresor actuó solo o como parte de una organización. Además, permitiría reconstruir los movimientos del imputado los días previos al momento en que accionó dos veces su pistola contra Kirchner sin poder disparar porque no había ninguna bala en la recámara.
Sospecha sobre los agentes
Al parecer las pruebas realizadas por la Policía para desbloquear el teléfono a través de su contraseña resultaron inútiles porque la desconocían. Por ello, se decidió devolver el aparato al resguardo del juzgado federal hasta la consecución de un sistema de desencriptado más avanzado. La magistrada sospecha de la forma de operar de los agentes y este domingo llamó a declarar a varios de ellos.
Capuchetti y el fiscal Carlos Rívolo también han determinado practicar pericias sobre una tableta HP encontrada en el piso de la calle Uriburu de Buenos Aires en la que vivía el brasileño de 35 años autor del ataque. En la vivienda asimismo se localizaron cien balas que eran «compatibles con el arma de fuego usada en el ataque», confirmaron fuentes judiciales al diario Clarín. Esta línea de investigación se completará con un análisis de la propia arma.
Por otro lado, también se ha ordenado visionar las imágenes obtenidas de las diversas cámaras de seguridad ubicadas en las cercanías de la vivienda de Cristina Fernández de Kirchner en el barrio de Recoleta. Se busca conocer si Montiel se personó por la zona en los días previos y el recorrido que realizó el mismo jueves, según explicaron fuentes de la causa. La Policía también explora las redes sociales del sospechoso.