El Gobierno de Sunak sufre su primera dimisión al entrar en su segunda semana

JUAN FRANCISCO ALONSO LONDRES / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

Las acusaciones de acoso y hostigamiento obligan al secretario de Estado de Educación, Gavin Williamson, a marcharse.
Las acusaciones de acoso y hostigamiento obligan al secretario de Estado de Educación, Gavin Williamson, a marcharse. TOLGA AKMEN | EFE

Las acusaciones de acoso y hostigamiento obligan a Gavin Williamson a marcharse

09 nov 2022 . Actualizado a las 21:45 h.

Las segundas oportunidades que Rishi Sunak le ha dado a algunos tories le están saliendo caras. Cuando siguen vivas las críticas por reenganchar a la controvertida Suella Braverman en el Ministerio del Interior, pese a que ella admitió haber compartido información confidencial por canales irregulares, ahora el primer ministro británico tiene que lidiar con las acusaciones de acoso y hostigamiento que han forzado al secretario de Estado de Educación, Gavin Williamson, a dimitir, menos de dos semanas después de haberlo designado.

Williamson renunció en la noche del martes, después de que en la última semana la prensa revelara que maltrató, a través de mensajes de texto, a una de las responsables de mantener la disciplina de voto entre los diputados conservadores. El escándalo forzó al mandatario a abrirle una investigación.

«Obviamente me lamento de haber designado a alguien que ha tenido que renunciar en estas circunstancias», admitió Sunak este miércoles, durante la sesión de control al Gobierno en la Cámara de los Comunes. Las palabras del mandatario, no obstante, no bastaron para calmar los ánimos de la oposición.

«Gavin Willamson ha pasado años creyendo que puede intimidar a otros, normalizando el comportamiento abusivo y por eso el primer ministro le dio un trabajo (…) Siempre se salió con la suya, porque gente como el primer ministro está en el poder», dijo el laborista Keir Starmer, quien no dudó en calificar de «patético matón» al dimisionario.

Sunak replicó que su gobierno se caracteriza por «el profesionalismo, integridad y rendición de cuentas», tal y como lo prometió al ser elegido el pasado 25 de octubre. Sin embargo, las informaciones periodísticas que aseguran que sabía con anticipación de los señalamientos contra Williamson ponen en duda estas promesas. 

Un expediente de cuidado

Williamson ha ocupado cargos en tres de los últimos cuatro gobiernos tories. Con Theresa May llegó a ser ministro de Defensa, pero en mayo del 2019 la entonces premier lo despidió fulminantemente después de que se le informara que él había sido la fuente que había filtrado a la prensa información del Consejo de Seguridad Nacional relacionada con la decisión de autorizar que la firma de telecomunicaciones china Huwaei participara en la construcción de la red 5G de telefonía móvil británica. Esa revelación tensó las relaciones entre Londres y el entonces gobierno de Donald Trump.

Cuando May se vio forzada a renunciar por su incapacidad de complacer a todas las facciones conservadoras con su acuerdo del brexit, Williamson respaldó las intenciones de Boris Johnson por hacerse con las llaves del 10 de Downing Street.

Cuando Johnson consiguió convertirse en primer ministro premió a Williamson y lo nombró ministro de Educación. Sin embargo, su mala gestión durante la pandemia del covid 19, en especial en lo referente al cierre y luego reapertura de los colegios lo convirtió en el ministro más impopular del Ejecutivo y, por ello, Johnson tuvo que despedirlo.