Wagner propone que Rusia frene su ataque y se centre en defender las zonas ocupadas
INTERNACIONAL
El mercenario Prigozhin apuesta por «conservar con uñas y dientes» Lugansk y los sectores en poder ruso de Donetsk, Jersón y Zaporiyia, además de Crimea
16 abr 2023 . Actualizado a las 05:00 h.A través de un manifiesto «programático» difundido este viernes por su servicio de prensa, el jefe de los mercenarios rusos del Grupo Wagner, Evgueni Prigozhin, insta a poner «punto final» a la llamada Operación Militar Especial en Ucrania (SVO en sus siglas en ruso), como el presidente Vladimir Putin bautizó la invasión del país vecino. A su juicio, «la opción ideal» sería anunciar el final de la intervención.
«Para las autoridades y para la sociedad en su conjunto, hoy es necesario poner algún tipo de punto final» a la ofensiva. Según sus palabras, «la opción ideal sería anunciar el final de la SVO, informar a todos de que Rusia ha alcanzado los objetivos que planeó y, en cierto sentido, los hemos logrado […] Ha sido aniquilada una gran parte de la población masculina activa de Ucrania y se ha intimidado a otra parte, a la que huyó a Europa». «Rusia les ha cortado el acceso al mar de Azov y a un buen trozo del mar Negro, se apoderó de una parte de territorio ucraniano y creó un corredor terrestre hasta Crimea», sostiene en su artículo.
«Con uñas y dientes»
Este empresario próximo a Putin considera que ahora lo importante sería «mantener hasta la muerte los territorios ocupados, conservarlos con uñas y dientes», en referencia a Lugansk y a los sectores en poder de las tropas rusas de Donetsk, Jersón y Zaporiyia, anexionados por Moscú el año pasado, además de Crimea, incorporada a Rusia en el 2014.
Prigozhin alerta de que, de no darse por terminada la invasión, «las Fuerzas Armadas de Ucrania llevarán a cabo la contraofensiva […], uno de cuyos resultados podría ser que consigan romper las defensas rusas en algún lugar». El líder de los Wagner advierte también sobre cualquier acuerdo con Kiev que suponga la devolución de territorios, ya que «pondría en marcha el mecanismo de fuerzas centrífugas en las regiones rusas», sugiriendo que sería el comienzo de la desintegración de la Federación Rusa.
«Rusia no puede aceptar ningún acuerdo […] y, si salimos maltrechos de esta batalla, no hay de qué preocuparse. Las regiones fortificadas de Rusia hacen imposible penetrar en sus profundidades», asegura Prigozhin, quien subraya que «o el ejército ucraniano es derrotado o Rusia se lamerá las heridas, ganará músculo y destrozará a sus rivales».
A la espera de un «empate»
Por su parte, el portavoz de la Dirección Central de Inteligencia del Ministerio de Defensa de Ucrania (GUR), Andri Yúsov, señalaba esta semana que las autoridades rusas se conformarían ahora con un «empate». Según Yúsov, «hace tiempo que las élites rusas perdieron la fe en la victoria, pero esperan un empate, una situación de punto muerto que les permita mantener ciertos intereses», en aparente alusión a las zonas de Ucrania actualmente bajo ocupación rusa.
El Instituto para el Estudio de la Guerra estadounidense (ISW) cree que las tropas rusas han agotado su potencial ofensivo al haber «perdido la capacidad de realizar varias operaciones de ataque en paralelo». Los analistas del Pentágono ponen como ejemplo la reciente transferencia de unidades del Kremlin desde Avdiivka a la región de Bajmut. «Tuvieron que optar entre tomar una ciudad o la otra», afirma este organismo. Eligieron Bajmut y, según la Inteligencia militar británica, han logrado avances. «Rusia ha inyectado nueva energía a su asalto contra la localidad, en Donetsk, después de que las fuerzas del Ministerio de Defensa ruso y del Grupo Wagner mejoraran su cooperación», aseguraba el viernes el Gobierno británico.
«Los grupos de asalto del Grupo Wagner siguen realizando los mayores avances en el centro de la ciudad, mientras que las tropas aerotransportadas rusas han dado apoyo a los mercenarios de Wagner desplegados en los flancos norte y sur» de Bajmut, sostiene la Inteligencia militar del Reino Unido. Y añade que «las defensas ucranianas aún retienen los distritos occidentales de la ciudad, pero han sido sometidas a un fuego de artillería particularmente (…) afrontan problemas significativos de suministro pero han realizado repliegues ordenados de las posiciones que se han visto obligados a ceder».
El jueves, el Ministerio de Defensa ruso anunció que sus fuerzas, que dicen controlar el 80 % de Bajmut, tienen ya cercado allí al ejército local, algo que desmintió el propio Prigozhin y los militares de Ucrania. El portavoz del grupo de tropas ucranianas en el este del país, Sergui Cherevati, dijo que el ejército de Kiev conserva la posibilidad de «recibir alimentos, municiones y medicamentos desde la retaguardia, así como de evacuar a los heridos». «Es todavía demasiado pronto para hablar del cerco completo (de Bajmut), las fuerzas ucranianas siguen teniendo margen de maniobra», declaró Prigozhin a través de su cuenta de Telegram.