Macron y Scholz proponern repetir las elecciones municipales que desataron las protestas en el norte del territorio kosovar de mayoría serbia
01 jun 2023 . Actualizado a las 21:59 h.Serbia y Kosovo no están dispuestos a rebajar la tensión como dejaron ver las acusaciones cruzadas que se lanzaron los presidentes de ambos países balcánicos en la cumbre celebraba este jueves en Moldavia. La escalada de violencia en el norte de Kosovo, donde se concentra la minoría serbia, preocupa a la UE, que ha intensificado sus esfuerzos diplomáticos para evitar que se reavive un viejo conflicto.
A su llegada a la cumbre, la presidenta de Kosovo, Vjosa Osmani, acusó a su homólogo serbio, Aleksandar Vucic, de apoyar a las «bandas criminales» que están detrás de las protestas contra la toma de posesión de alcaldes de origen albanés. Para Pristina, la crisis está provocada porque Belgrado aún niega su existencia y soberanía territorial. «Kosovo es una nación independiente y soberana y cuanto antes lo asuma, mejor será para la paz y la estabilidad en la región», lanzó.
El presidente Vucic, por su parte, dijo que intentará persuadir a los serbios para que se manifiesten pacíficamente, pero apuntó que «resolver el problema pasa por la retirada de los supuestos alcaldes». Vucic fue más allá y pidió a los regidores que renuncien a ocupar su cargo como un primer paso para el diálogo. Una petición que rechaza el primer ministro kosovar, Albin Kurti.
Tras su encuentro el jueves con Kurti, el jefe de la diplomacia de la UE, Josep Borrell, se reunió con Vucic y Osmani, que también se citaron por separado con el presidente Emmanuel Macron y el canciller Olaf Scholz, que propusieron la repetición sin demora de las elecciones municipales con la participación de todas las partes.
En la dividida ciudad de Mitrovica, varios cientos de albanokosovares se concentraron en apoyo del Gobierno en un puente que conduce al sector norte, donde viven los serbios, blandiendo banderas de la antigua guerrilla UCK y de la Gran Albania. Mientras, los serbios se concentraban, por cuarto día consecutivo, frente a los ayuntamientos de Zvecan, Leposavic y Zubin Potok, custodiados por soldados de la OTAN, para exigir la retirada de los alcaldes albaneses.