Von der Leyen apuesta por afrontar ya el proceso de ampliación para crear una UE con más de 30 países y 500 millones de habitantes
INTERNACIONAL
La presidenta de la Comisión anuncia en su último discurso sobre el estado de la Unión que se destinarán otros 50.000 millones a Ucrania durante cuatro años para su recuperación
13 sep 2023 . Actualizado a las 13:53 h.La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, pronunció este miércoles en la sede de la Eurocámara en Estrasburgo su último discurso del estado de la Unión de esta legislatura, con una apuesta firme por una Europa con más de treinta países miembros y 500 millones de habitantes para reforzar la posición geopolítica del espacio europeo frente a la amenaza rusa.
Después de repasar los logros de su mandato, con un cumplimiento de más del 90 % de los objetivos que el Ejecutivo comunitario se fijó al inicio de la legislatura, Von der Leyen «se refirió a la llamada de la historia para completar nuestra unión», con una clara apuesta para iniciar en los próximos años la ampliación de la Unión Europea a Ucrania, Georgia, Moldavia y los Balcanes occidentales (Bosnia, Serbia, Montenegro, Albania y Macedonia del norte), todos ellos territorios que estaban bajo la influencia rusa antes de la caída del muro de Berlín. «En un mundo en que algunos están intentando apropiarse de países uno a uno, no podemos permitirnos dejar abandonados a nuestros compañeros europeos», dijo, en clara referencia a la política expansionista rusa. «En un mundo donde el tamaño y el peso importan, completar nuestra Unión redunda claramente en el interés estratégico y de seguridad de Europa», aseguró.
La presidenta de la Comisión dejó claro su firme convencimiento de la necesidad de ampliar la Unión hacia el este para aumentar el peso demográfico y estratégico del espacio europeo frente a otras potencias económicas como China, un país con el que cree que hay que mantener abierto el diálogo, pero investigando la competencia desleal que suponen sus altísimas subvenciones públicas a su industria automovilística. «Necesitamos tener una visión para una ampliación exitosa. Una Unión completa con más de 500 millones de personas que vivan en una Unión libre, democrática y próspera», aseguró, en línea con la Presidencia española de la UE, que también defiende el inicio del proceso de ampliación, que quedará para la próxima legislatura, aunque será un asunto que tratarán los líderes europeos en la cumbre de Granada de octubre. «El futuro de los Balcanes Occidentales está en nuestra Unión. El futuro de Moldavia está en nuestra Unión. Y sé lo importante que es la perspectiva de estar en la UE para tanta gente en Georgia», proclamó en medio de los aplausos de los europarlamentarios, dando a entender que el estatus actual de este país está más lejos de la integración europea que el resto. «La ampliación de la UE debe ser un catalizador de progreso», recalcó.
Recordó los éxitos de la ampliación realizada hace veinte años y animó los parlamentarios a prepararse para una Unión completa, sabiendo que se trata de un deseo «compartido» por la Eurocámara, pero superando «los viejos debates binarios sobre la ampliación».
Eso sí, condicionó la ampliación a que los poderes judiciales «sean independientes, las oposiciones sean respetadas y los periodistas estén protegidos», por lo que anunció que extenderá los informes sobre el estado de Derecho a los países en vías de adhesión, «pues los derechos fundamentales son la base de nuestra Unión».
Von der Leyen inició sus referencias a Ucrania con la triste historia de la escritora ucraniana Victoria Amelina, asesinada por un misil ruso mientras estaba con otros compañeros escritores en un restaurante, entre ellos el colombiano Héctor Abad Faciolince, presente ayer en el Parlamento y que recibió una calurosa ovación de los parlamentarios mientras mostraba en pie el retrato de su amiga que, en un encuentro posterior con periodistas españoles, recordó que su amiga escritora tenía la edad de su hija cuando murió. También se refirió a la resistencia de algunos países de Sudamérica a condenar la agresión rusa a Ucrania, relacionándolo con la neutralidad durante la Segunda Guerra Mundial y con la equidistancia de algunos países hacia la Alemania nazi. «La mayor cercanía a Putin en Europa está en la extrema derecha; la mayor cercanía a Putin en Latinoamérica está en la extrema izquierda», explicó.
La presidenta de la Comisión anunció que se destinarán 50.000 millones de euros adicionales a Ucrania durante cuatro años para inversiones y reformas, que se sumarán a los 12.000 millones que fueron destinados este año al país invadido por Rusia. «Esto ayudará a construir el futuro de Ucrania para reconstruir un país moderno y próspero», pronosticó, al tiempo que garantizaba que se mantendrá lo que sea necesaria la cobertura a los cuatro millones de refugiados ucranianos que fueron acogidos en tierras europeas.
Aunque no hizo ni una sola referencia a su eventual candidatura a revalidar el cargo, el discurso de Ursula von der Leyen estaba orientado al futuro de la Unión, dando claves de lo que debería afrontarse en la próxima legislatura y adelantando cuáles serían las coordenadas en la que se moverá su más que posible intento de volver a ser presidenta de la Comisión Europea.
La jefa del Ejecutivo comunitario puso el énfasis en el pacto prácticamente ultimado sobre la emigración, uno de los grandes acuerdos con el que puede culminar la actual legislatura y que podría alcanzarse de forma definitiva antes de las elecciones europeas del 9 de junio del 2024. «Un acuerdo sobre el pacto nunca ha estado tan cerca. El Parlamento y el Consejo tienen una oportunidad histórica de superarlo. Demostremos que Europa puede gestionar la migración con eficacia y compasión. Hagámoslo». También anunció que se organizará una conferencia internacional contra el tráfico de personas. «Es hora de poner fin a este negocio insensible y criminal», proclamó, mientras admitía que la UE necesita emigrantes cualificados.
Entre los logros de su mandato destacó el Pacto Verde Europeo, «una oportunidad para preservar nuestro futuro bienestar» y que sitúa a la UE a la vanguardia de la lucha contra el cambio climático y la sostenibilidad. También la creación de los cimientos de una Unión de la salud, que se inició con la compra centralizada de vacunas durante la pandemia de covid. En el ámbito económico, aseguró que Europa está más cerca que nunca del pleno empleo, así que sus reservas se centran en la falta de trabajadores en determinados ámbitos. «En lugar de millones de desempleados buscando empleo hay millones de puestos de trabajo esperando empleados». En este ámbito destacó que en el espacio económico europeo hay ocho millones de jóvenes que ni estudian ni trabajan. «Hay que mejorar el acceso al mercado laboral», concluyó.
El objetivo clave de la política exterior de la UE: garantizar la victoria de Ucrania en la guerra
El vicepresidente y alto representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, describió este miércoles en el Parlamento europeo en Estrasburgo cuáles son los retos de la política exterior de la UE para los próximos años, poniendo por encima de todos ellos la prioridad de «garantizar la victoria de Ucrania en la guerra contra Rusia», pero sin renunciar a las vías de diálogo, aunque de momento «no hay una línea clara para conseguir la paz».
Sobre el proceso de ampliación anunciado por Ursula von der Leyen, el exministro de Exteriores español fue claro: «Las promesas hechas a Ucrania hay que cumplirlas», dijo, pero matizó que la ampliación debe ir de la mano de cambios en el funcionamiento de la UE y caminar hacia la votación por mayoría cualificada frente a la actual unanimidad.
Ante un grupo de periodistas españoles, Borrell anunció que en los próximos días viajará a China, un país con el que existe un «enorme desequilibrio comercial» y con el que se pretende «recalibrar» el acercamiento diplomático debido a la «competencia sesgada por los subsidios estatales», en ámbitos como el coche eléctrico.
Respecto a la política de defensa y seguridad, Borrell se mostró favorable a coordinar la inversión militar de los países miembros. «Hay veintisiete ejércitos, pero estos ejércitos deben actuar de forma coordinada, sobre todo en lo que respecta a la compra de armamento», dijo.
Otra de las grandes prioridades de la política exterior, confirmó Borrell, es asegurar la estabilidad en el Sahel, una de las zonas del mundo en la que hay más riesgos para la seguridad global y en la que grupos rebeldes o terroristas cada vez controlan más territorio.