España se apunta a la campaña de promover a la primera secretaria general de la ONU

Mercedes Gallego NUEVA YORK / COLPISA

INTERNACIONAL

Foto de archivo de Michelle Bachelet, durante su estapa de alta comisionada para los Derechos Humanos de la ONU.
Foto de archivo de Michelle Bachelet, durante su estapa de alta comisionada para los Derechos Humanos de la ONU. PIERRE ALBOUY | REUTERS

La ministra de Igualdad, Ana Redondo, defiende durante su estreno en las Naciones Unidas que sería muy valiosa la aportación de una mujer al frente del organismo internacional

15 mar 2024 . Actualizado a las 17:13 h.

Nueve hombres han dirigido la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en sus casi ocho décadas de vida: cuatro europeos, dos asiáticos, dos africanos y un latinoamericano. Todo el mundo cree que es hora de que una mujer asuma el trabajo más imposible del mundo y se convierta en la primera de la historia en liderar la organización.

España se ha sumado con entusiasmo a esa campaña a través de la ministra de Igualdad, Ana Redondo, que esta semana ha asistido a las 68 Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer, que se desarrolla en la sede de la ONU de Nueva York. Redondo se manifestó entusiasmada por las medidas de cuidados comunitarios que proponen sus colegas latinoamericanas y cree que la aportación de una mujer a ese cargo sería muy valiosa.

La ministra española no quiso mencionar a ninguna candidata, pero respondió con una sonrisa al nombre de Michelle Bachelet. La expresidenta chilena que dirigió ONU Mujeres y fue la Alta Comisionada para los Derechos Humanos entre el 2008 y el 2022 está acostumbrada a romper moldes y goza de amplio apoyo, aunque hay también otros nombres que suenan, a dos años de que se vote al sustituto o sustituta del portugués António Guterres. Los países latinoamericanos están conduciendo sondeos informales para tantear la fuerza que tendría la chilena frente a una rival potencial del Este de Europa, el único bloque que nunca ha tenido un representante al frente de la secretaría general.

Redondo reafirmó «la voluntad firme de encarrilarnos al territorio» de la primera latinoamericana al frente de la ONU como algo «justo y necesario», porque «no solo toca romper el techo de cristal, sino hacer una limpieza de suelos pegajosos». En su estreno en las Naciones Unidas, la ministra ha presumido de representar a un Gobierno «profundamente feminista» que, según ella, es faro en el mundo y despierta admiración. «España es un referente a nivel internacional por su agenda feminista y su manera de abordarla de forma transversal», dijo en conferencia de prensa, al término de su intervención. Su objetivo es alcanzar la igualdad de la mujer dentro de la agenda pública, «y no al margen de ella», puntualizó.

Compromiso por Palestina Aunque se marcha entusiasmada por la posibilidad de realizar esa labor de forma multilateral, reconfortada por el impulso que ve en otros países, aseguró que lo que más le ha llegado en toda la semana ha sido el encuentro que mantuvo con la representante de la Autoridad Palestina, lo que le ha despertado una gran empatía y compromiso. «Nos avergonzamos de lo que está pasando», confesó.

En la agenda tiene para presentar en los próximos días en el Congreso la ley sobre la abolición de la prostitución, y, a más largo plazo, el diagnóstico sobre la situación de acoso que sufren las mujeres en el medio audiovisual, a exponer en el marco del próximo Festival de San Sebastián.