Las bandas criminales operan principalmente en España, Bélgica, Italia, los Países Bajos y Alemania
05 abr 2024 . Actualizado a las 21:02 h.Europol, la agencia europea de cooperación policial, presentó ayer en Bruselas una cartografía para facilitar a los Estados miembro ubicar las actividades de hasta 821 redes de crimen organizado presentes en suelo europeo y consideradas muy peligrosas; unas bandas cuyas principales operaciones en Europa se sitúan en España, Bélgica, los Países Bajos, Italia y Alemania, informa Europa Press.
El informe, el primero que analiza en profundidad los detalles que hacen a esas organizaciones tan peligrosas, se basa en los datos aportados por los Estados miembros de la UE y otros países y es un «paso» para entender cómo funcionan esas redes y cuáles son sus capacidades básicas, indicó Europol.
El estudio cifra en más de 25.000 las personas que integran las 821 redes criminales de riesgo activas en variedad de crímenes, fundamentalmente en el narcotráfico, pero también en otras áreas como el tráfico de personas, delitos contra la propiedad y blanqueo de capitales.
Europol advierte en el informe de que más del 70 % de las redes se involucran en la corrupción para facilitar la actividad delictiva u obstruir la aplicación de la ley o los procedimientos judiciales. Además, el 68 % utilizan la violencia y la intimidación como característica «inherente» a su modus operandi.
Como factores de riesgo establece, por ejemplo, la facilidad con que las redes logran adaptarse y son capaces de infiltrarse en los canales legales económicos y comerciales, lo que favorece el crecimiento de sus negocios delictivos, el lavado de los beneficios y que escapen mejor a la detección. De hecho, el 86 % de las redes mapeadas utilizan estructuras empresariales legales, la gran mayoría en la UE.
«Necesitamos saber contra qué estamos luchando; por eso el mapeo del crimen organizado es un objetivo clave de nuestra estrategia en la UE», dijo la eurocomisaria de Interior, Ylva Johansson, en la presentación del informe, tras reconocer que el crimen organizado es uno de los principales retos por la «amenaza que supone contra la sociedad».
En España operan redes integradas por nacionales de países del Este, así como belgo-neerlandesas, de los países bálticos, rumanas o polacas, entre otras. Las que suponen una mayor amenaza solo las que se dedican al tráfico de drogas, al fraude del IVA o a los delitos contra la propiedad. España es además, junto con Francia, Italia, Malta y Portugal uno de los países más afectados por las mafias que cometen robos y hurtos en viviendas y de vehículos de motor.