Un español, entre los heridos por las turbulencias en el vuelo entre Londres y Singapur en el que murió un hombre

La Voz REDACCIÓN

INTERNACIONAL

Reuters

Más de 50 personas permanecen ingresadas en distintos hospitales de Tailandia, 20 de ellas en unidades de cuidados intensivos

31 may 2024 . Actualizado a las 15:27 h.

Un pasajero español sufrió una contusión durante el vuelo de Singapore Airlines que tuvo que aterrizar de emergencia el martes en Bangkok tras unas «súbitas turbulencias» que provocaron un fallecido y decenas de heridos. 

Más de 50 personas permanecen ingresadas en distintos hospitales de Tailandia, 20 de ellas en unidades de cuidados intensivos. Los heridos en la uci son de nacionalidad británica (6), malasia (6), australiana (3), singapurense (2), neozelandesa (1), filipina (1) y un hongkonés, conforme a la última actualización del hospital Samitivej.

El español, cuya identidad y edad no han trascendido por el momento, «se dio un golpe con el techo», pues no llevaba el cinturón de seguridad en el momento de las repentinas turbulencias, y «no tiene ninguna fractura, es solo una contusión», según dijeron a Efe fuentes cercanas al caso.

El fallecido es un británico de 73 años, víctima de un ataque cardíaco durante el vuelo, el que viajaban dos españoles.

Brusca pérdida de altura durante 4 minutos

Conforme al portal FlightRadar, que registra los vuelos en todo el mundo, el aparato, un Boeing 777-300 ER, sufrió una brusca pérdida de altitud durante 4 minutos por la que descendió desde los 37.000 a los 31.000 pies (de 11.200 metros a 9.400 metros), cuando aparentemente logró estabilizarse.

El director ejecutivo de Singapore Airlines, Goh Choon Phong, pidió este miércoles disculpas por la «traumática experiencia» del vuelo y sus «más sinceras condolencias a los familiares y seres queridos del fallecido», en un vídeo divulgado en redes sociales por la aerolínea.

Según informó la aerolínea, el avión transportaba a 211 pasajeros y 18 tripulantes, la mayoría australianos (56), británicos (47) y singapurenses (41), así como dos españoles, incluyendo al herido.

Singapore Airlines confirmó en un comunicado que 131 pasajeros y 12 tripulantes que iban a bordo del SQ321 llegaron a Singapur este miércoles a las 5:05 (11:05 GMT del martes) en un vuelo fletado para ellos.

La aerolínea aseguró hoy que está «cooperando plenamente» con las autoridades para la investigación del incidente, y que están proveyendo de «todo el apoyo posible a los pasajeros y tripulantes que permanecen en Bangkok».

Un pasajero del vuelo de Singapore Airlines: «El avión tembló y, un segundo después, cayó»

«El avión tembló y, un segundo después, se precipitó», narra un pasajero canadiense que viajaba en el vuelo de Singapore Airlines que tuvo que realizar un aterrizaje de emergencia en Bangkok la víspera tras «súbitas y fuertes turbulencias», que provocaron un muerto y decenas de heridos. «No hubo aviso. El avión comenzó a temblar y, un segundo después, se precipitó. Todo duró como dos segundos», asegura a Efe en una conversación telefónica el pasajero, quien prefiere preservar su identidad y que viajaba con su esposa.

Ambos salieron ilesos del incidente pues llevaban puesto el cinturón de seguridad —«sentimos como si estuviéramos en una montaña rusa», describe, «pero no saltamos del asiento»—, a diferencia de otros pasajeros no amarrados que estaban enfrente y alrededor. «Volaron hasta el techo, golpeándose con él y cayendo de nuevo... Otros objetos, como los carritos (de la comida y bebida), también... Hubo tantos golpes que se podían ver agujeros en los paneles (del aparato)», señala.

El hombre, residente en Singapur —el destino final del vuelo SQ321, que cubría la ruta desde Londres a la ciudad-Estado asiática—, considera que el momento de la sacudida —unas 2,5 horas antes del aterrizaje y diez horas después del despegue, al sobrevolar Birmania— fue «muy desafortunado». «Todo el mundo estaba despertándose, yendo al baño, la tripulación preparando el desayuno... Si hubiera ocurrido una hora antes, con casi todo el mundo durmiendo, el daño habría sido mínimo», indica.

«Muchos miembros de la tripulación sufrieron heridas porque no estaban sentados, la mayoría cojeaba o sangraba después», añade.