La segunda vuelta de los comicios galos, pendiente del efecto anti-Le Pen
INTERNACIONAL
Los últimos sondeos alejan a la ultraderecha de la mayoría absoluta
06 jul 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Las intenciones de voto del partido de Marine Le Pen han ido disminuyendo con el paso de los días. Según el último sondeo de Ipsos-Talan, realizado entre el 3 y 4 de julio, la Agrupación Nacional (RN) y sus aliados solo obtendrían entre 170 y 205 escaños de la nueva Asamblea Nacional (lejos de la mayoría absoluta de 289). Le sigue el Nuevo Frente Popular (NFP), que en un caso extremo podría arrebatar la mayoría relativa a la ultraderecha, ya que dispondrían de entre 145 y 175 diputados. En tercer lugar se confirma la pérdida de mayoría de los macronistas, que obtendrían entre 118 y 148 escaños, una cifra mucho más elevada de lo esperado tras la primera vuelta gracias al «frente republicano» constituido estos días, que les ha permitido candidaturas triangulares en duelos con el RN, que son más favorables para el candidato macronista. Además, el índice de participación podría superior al del pasado domingo (66,7 %), ya que se espera que se sitúe entre 66 % y 70.
Las horquillas que ofrece el sondeo de Elabe son más favorables para la extrema derecha, aunque también reflejan que las cifras más optimistas para el partido lepenista se desinflan. El RN obtendría la mayoría relativa con entre 200 y 230 escaños, lo que supondría, en el peor de los casos, duplicar los resultados obtenidos en el 2022 (89 escaños). El Nuevo Frente Popular y los candidatos bajo la etiqueta de «Diversa izquierda», podrían obtener entre 165 y 190 diputados, pero nunca los suficientes para arrebatar la mayoría a la Agrupación Nacional. El campo presidencial quedaría reducido a entre 120 y 140 escaños, contra los 245 que tenía en el mes de junio.
Esta campaña ha estado caracterizada por el alto nivel de violencia tanto verbal como física. Según el ministro del Interior, Gérald Darmanin, ha habido que lamentar 51 agresiones físicas contra candidatos o militantes, que en algunos casos han terminado en el hospital. El perfil de los agresores «es muy variado» según el ministro y puede ir «desde un simple ciudadano que ha perdido los nervios a militantes de ultra izquierda o ultra derecha».
El primer ministro, Gabriel Attal, volvió a salir ayer a la calle para intentar convencer a los últimos electores indecisos, sin detenerse ante los abucheos de algunos votantes conservadores. Poco se ha dicho del golpe que ha recibido el primer ministro con la disolución de la Asamblea. Su rostro aparece envejecido en tan solo tres semanas. No solo ha visto su mandato esfumarse en seis meses, sino que ha calibrado el nivel de complicidad que le une a Emmanuel Macron, quien tramó la disolución de la Asamblea sin decirle una sola palabra, mientras que el padre del presidente de la República lo sabía desde hace dos meses, y un reducido grupo de consejeros también. Además, hasta podría perder su escaño, si los votantes deciden apoyar a su contrincante, una candidata socialista.