Starmer anulará la ley de amnistía a los crímenes del conflicto de Irlanda del Norte
INTERNACIONAL
El nuevo primer ministro derogará una norma impulsada por el Ejecutivo «tory» en el 2022
09 jul 2024 . Actualizado a las 18:51 h.Keir Starmer no quiere que nada altere la delicada paz en Irlanda del Norte. Tampoco la impunidad ante crímenes pasados. Así, el nuevo primer ministro británico anunció que derogará la Ley del Legado y Reconciliación que el Gobierno del tory Boris Johnson aprobó en septiembre del 2022 y con la cual se buscaba dar carpetazo a los juicios por los crímenes ocurridos durante The Troubles, el período de violencia entre protestantes unionistas y republicanos católicos. El texto abre las puertas a una amnistía condicional a los soldados y paramilitares implicados en delitos.
La noticia la dio este lunes el flamante premier laborista, durante su primera visita al territorio, donde también prometió «estabilidad» para la región. «Uno de los grandes problemas de los últimos 14 años, pero particularmente de los últimos seis u ocho años, ha sido la inestabilidad y los constantes cambios, pero eso termina hoy», aseveró.
Starmer, quien siempre se opuso a la ley, busca con su derogación mejorar también las relaciones con la vecina República irlandesa y conseguir que Dublín retire la denuncia que presentó contra Londres en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos. Sin embargo, desde el otro lado de la frontera, aunque han saludado el anuncio, descartan que vayan a desistir de su querella de inmediato. «Debemos ir paso a paso», dijo el domingo el taoiseach irlandés Simon Harris.
De eso nada
Starmer también descartó la posibilidad de autorizar un referendo sobre la unificación de las dos Irlandas. «Estoy absolutamente comprometido con los Acuerdos de Viernes Santo», replicó el mandatario. Los pactos que pusieron fin a la violencia sectaria en 1998 establecen la posibilidad de celebrar una consulta respecto a la reunificación, pero para que ello ocurra debe haber una mayoría significativa e de acuerdo. Según los sondeos, esto último no se cumple.
Desde el Sinn Féin insisten en que para el 2030 debería darse un referendo. La formación, otrora brazo político del extinto Ejército Republicano Irlandés (IRA), no solo gobierna por primera vez el territorio, sino que en las generales obtuvo siete de los 18 escaños que corresponden a la región.