
El portavoz del Ministerio de Exteriores iraní, Nasser Kananí insinuó en un comunicado que «esas alegaciones tienen motivos y objetivos políticos maliciosos»
17 jul 2024 . Actualizado a las 14:27 h.Irán reiteró este miércoles que no tenía un plan para asesinar a Donald Trump semanas antes del atentado fallido que tuvo lugar el pasado sábado, tal y como aseveraron fuentes de la inteligencia estadounidense.
«Rechazamos contundentemente cualquier implicación en el reciente ataque armado contra Trump o las alegaciones de que Irán tenía planes para llevar a cabo una acción similar», dijo el portavoz del Ministerio de Exteriores iraní, Nasser Kananí, en un comunicado. «Esas alegaciones tienen motivos y objetivos políticos maliciosos», aseveró.
El diplomático afirmó que Teherán está determinado a tomar medidas legales contra Trump por su papel directo en el asesinato con un dron en Bagdad del general iraní Qasem Soleimani en el 2020, comandante de la fuerza Al Quds, cuerpo exterior de la Guardia Revolucionaria iraní.
La Misión de Irán ante la ONU —único canal oficial iraní en suelo estadounidense, al no existir relaciones diplomáticas— ya había descalificado las acusaciones horas antes, que calificó como «sin fundamento» y «malintencionadas».
Según declaró a Efe un alto funcionario de seguridad nacional estadounidense, cuando los servicios secretos detectaron hace semanas el plan iraní, la Casa Blanca alertó del peligro añadido tanto a la campaña de Trump como al Servicio Secreto, que tomó medidas adicionales para proteger al expresidente.
La portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, Adrienne Watson, dijo a Efe que Irán lleva años amenazando a funcionarios estadounidenses en venganza por el ataque que Trump ordenó en el 2020 y que acabó con la vida del general Qasem Soleimani.
Irán ha llamado en numerosas ocasiones a «vengar» la muerte de Soleimani. El fallecido presidente iraní Ebrahim Raisí afirmó hace dos años que la umma (la comunidad musulmana) se tomaría la venganza por su mano si Trump no era juzgado por el asesinato del general.
Y el año pasado, el comandante de las Fuerzas Aéreas de la Guardia Revolucionaria, Amir Ali Hajizadeh, afirmó que «nosotros buscamos matar a Trump» por la muerte de Soleimani en una entrevista en televisión.
Los excandidatos republicanos muestran su apoyo a Trump
Los excandidatos del Partido Republicano a la Casa Blanca han mostrado este martes su total apoyo al expresidente estadounidense Donald Trump durante la celebración de la segunda jornada de la Convención Republicana en Milwaukee (Wisconsin), donde se ha certificado la candidatura del magnate a la Presidencia y del senador J.D. Vance a la Vicepresidencia.
«Voy a votar por el presidente Trump. Somos mucho mejores cuando somos más grandes. Somos más fuertes cuando acogemos en nuestro partido a personas que tienen orígenes y experiencias diferentes», ha manifestado la exgobernadora de Carolina del Sur Nikki Haley, que fue la candidata que más aguantó el pulso al magnate durante las primarias republicanas.
Haley ha asegurado durante su intervención que los republicanos deben «salvar a Estados Unidos» en un «momento decisivo» tanto para el partido como para el país, por lo que ha defendido «dejar a un lado sus diferencias» para centrarse en lo que hace fuerte a la nación, según ha publicado la cadena CNN.
En ese sentido, ha destacado que durante el mandato de Trump el presidente de Rusia, Vladimir Putin, «no hizo nada» en Ucrania, comparando este período con el de Barack Obama, cuando Rusia se anexionó Crimea, y con el de Joe Biden, cuando el Kremlin inició la guerra en Ucrania. «Cuando Donald Trump era presidente, Putin no hizo nada. Ni invasiones ni guerras. Eso no fue por accidente. Putin no atacó Ucrania porque sabía que Donald Trump era duro. Un presidente fuerte no comienza guerras. Un presidente fuerte previene guerras», ha añadido.
Por su parte, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, ha defendido al expresidente, que ha sido «demonizado», «demandado», «imputado», y que «casi pierde la vida», por lo que ha instado a «no defraudar» ni a Trump ni a Estados Unidos.
«Enviemos a Biden de vuelta a su sótano, y enviemos a Trump de vuelta a la Casa Blanca. Me alarma que el actual presidente de Estados Unidos carezca de la capacidad para desempeñar las funciones de su cargo. Seamos honestos aquí. Biden es solo una figura decorativa. Es una herramienta para imponer la agenda izquierdista al pueblo estadounidense», ha añadido.
El excandidato y senador de Texas Ted Cruz ha mostrado su apoyo a Trump tras su intento de asesinato, y ha «agradecido a Dios Todopoderoso por protegerle». Tras ello, ha usado su intervención para advertir contra la «invasión» de migrantes en la frontera con México, y ha acusado a los demócratas de permitir la entrada de «violadores» y «asesinos» para conseguir votos de «migrantes ilegales».
«Las cifras no nos muestran el verdadero precio que está pagando nuestro país. Los demócratas han decidido cínicamente que querían más los votos de los ilegales que proteger a nuestros hijos. Hoy, como resultado de la Presidencia de Joe Biden, vuestra familia está menos segura, vuestros hijos están menos seguros, el país está menos seguro», ha afirmado Cruz, quien ha asegurado que Trump «arreglará» la situación.
De igual forma ha hablado el excandidato Vivek Ramaswamy, que ha diferenciado entre «migrantes legales» y «migrantes ilegales» en un discurso dirigido a la comunidad afroamericana.
La convención republicana dominará todo el escenario mediático durante los próximos días y sus participantes no se olvidarán de asegurar a los asistentes y espectadores que Biden, a quien una veintena de representantes demócratas han pedido que se retire en favor de un candidato más capacitado, no está en condiciones de seguir gobernando el país; un mensaje que, combinado con las dimensiones que alcanzará Trump durante el evento, podría complicar todavía más sus opciones a la reelección, aunque todavía queden más de tres meses para una crucial cita con las urnas.