Más de un centenar de muertos tras seísmo de magnitud 6,8 en la región china del Tíbet

La Voz REDACCIÓN

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El epicentro se situó a 85 kilómetros del Everest, que fue cerrado al público hasta nuevo aviso

08 ene 2025 . Actualizado a las 09:12 h.

Al menos 126 personas murieron y otras 188 resultaron heridas a causa un terremoto de magnitud 6,8 (7,1 según el Servicio Geológico de EE.UU. ) que tuvo lugar en la mañana de ayer y que golpeó con dureza el condado de Tingri, en la región autónoma del Tíbet, en el suroeste de China. El seísmo, originado a una profundidad de diez kilómetros bajo la superficie, provocó medio centenar de réplicas y afectó además a Bangladés, Nepal, Bután y la India.

En el citado condado de Tingri, el más afectado, se derrumbaron más de 1.000 viviendas, según el diario Nanfang Daily. Según Xinhua, residen en un radio de 20 kilómetros alrededor del epicentro unas 6.900 personas. Además, muchas casas de la ciudad sagrada de Shigatse se vieron dañadas dada la poca profundidad del epicentro del terremoto, lo que llevó a las autoridades regionales a poner en marcha labores de búsqueda y rescate en un intento por hallar supervivientes. Para ello, se desplegaron efectivos del Ejército y decenas de miembros del personal de emergencias. Las autoridades gubernamentales lanzaron además una respuesta de emergencia para asignar urgentemente 22.000 piezas de suministros de socorro que incluyen tiendas de campaña, abrigos, edredones, camas plegables y otros enseres especiales para casos de desastre en zonas frías, pues la zona quedó sin suministros de electricidad ni agua. Las temperaturas en esta zona del Tíbet pueden alcanzar mínimas de -16 °C por la noche en la actual época invernal. «Es invierno y debemos hacer todo lo posible para garantizar la subsistencia básica y el calor de la población en la zona del desastre», explicó el primer ministro chino, Li Qiang.

Imagen de la situación del epicentro
Imagen de la situación del epicentro USGS / HANDOUT | EFE

Según la cadena estatal CCTV, los equipos de bomberos locales han movilizado a más de 1.500 efectivos para las tareas de búsqueda y rescate de supervivientes.

La situación llevó al presidente Xi Jinping a ordenar la puesta en marcha de todos los recursos posibles para las labores de búsqueda y rescate de la población. Así, pidió tratar a los heridos, minimizar las víctimas, prevenir desastres secundarios y reubicar a los afectados. «Debemos fortalecer el monitoreo y la alerta temprana de terremotos, asignar materiales de rescate de emergencia reparar las infraestructuras dañadas lo antes posible, organizar los arreglos básicos de viviendas para la gente y garantizar un invierno seguro y cálido», dijo.

El epicentro del temblor se situó a unos 85 kilómetros del monte Everest, ubicado justo en la frontera entre China y Nepal, el cual ha sido cerrado al público hasta nuevo aviso para garantizar la seguridad de los visitantes y el personal.

El temblor se sintió en zonas de Nepal y en varios estados del norte de la India, informaron medios de ambos países, aunque aún no han sido reportados muertes ni daños en ninguna de las dos naciones.

Tíbet y otras zonas del oeste de China son frecuente escenario de terremotos, por la cercanía del punto de fricción de la placa tectónica asiática con la india, pero debido a la baja densidad de población en la zona, en muchas ocasiones los seísmos se producen en áreas escasamente habitadas.

En diciembre del 2023, un temblor de magnitud 6,2 dejó más de 150 fallecidos en la región vecina de Qinghai y en la provincia occidental de Gansu. En el 2015, un terremoto de magnitud 7,8 causó más de 9.000 muertos en la cercana Nepal, la mayor tragedia natural de su historia.