Milei y Macri, en un callejón sin salida

CECILIA VALDEZ BUENOS AIRES / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

El presidente de Argentina, Javier Milei, en el Foro de Davos
El presidente de Argentina, Javier Milei, en el Foro de Davos MICHAEL BUHOLZER | EFE

El presidente ya ha advertido al PRO que no aceptará un cogobierno en Argentina

03 feb 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

El vínculo entre el actual presidente argentino, Javier Milei, y el expresidente Mauricio Macri no encuentra rumbo, pero las elecciones de noviembre meten presión y apuran definiciones. Tal es así, que la pasada semana Macri suspendió sus vacaciones. Volvió a Buenos Aires y reunió a la plana mayor de su partido, el PRO, con el objetivo de resolver una de las mayores incógnitas: cómo queda la relación con Milei y su fuerza, La Libertad Avanza (LLA). 

La discusión del comité ejecutivo del PRO primero fue virtual, y luego presencial; pero los temas fueron prácticamente los mismos. Los gobernadores de Entre Ríos, Rogelio Frigerio, y de Chubut, Nacho Torres; los alcaldes de la ciudad de Buenos Aires, Jorge Macri —hermano de Mauricio—, Soledad Martínez (Vicente López) y Guillermo Montenegro (Mar del Plata); y los legisladores nacionales Cristian Ritondo, María Eugenia Vidal y Diego Santilli; así como Facundo Pérez Carletti, secretario general del partido, y Fernando De Andreis, dirigente y principal estratega del macrismo, defendieron acompañar al Gobierno en su agenda parlamentaria de las sesiones extraordinarias del Congreso, y no descartan la posibilidad de un acuerdo político con LLA. Pese a los desplantes de los que viene siendo objeto —que incluyen la ruptura del bloque en la ciudad de Buenos Aires en las últimas horas—, el macrismo insiste en acompañar al oficialismo.

Mientras el PRO intenta evitar más fugas de su partido, Milei se consolida en la arena política y ya les dejó claro a los amarillos —el color que caracteriza al PRO—, que es a todo o nada, y que no está dispuesto a aceptar un cogobierno. Los dos espacios de la derecha tradicional argentina tienen claro que disputan un mismo electorado, pero desde LLA también saben que el PRO, en este momento, no tiene ni peso ni votos. Si bien el Gobierno cuenta con muy pocos legisladores, y con ningún gobernador, también da por hecho que esa situación se revertirá en noviembre y que para ello no necesita del PRO.

Durante estos días, Macri se concentra en evitar una mayor sangría —varios referentes y legisladores del PRO dejaron ese partido para sumarse a las filas de LLA en los dos últimos meses—, y en lidiar con los gobernadores que englobados en su fuerza van ganando cada vez más autonomía. Pero además de mostrar unidad interna, los macristas deberán encontrar un lugar que les permita diferenciarse de LLA, y volver a ser una opción para su propio electorado. 

En los últimos días, sin embargo, los constantes enfrentamientos entre Milei y el PRO no solo no cesan, sino que se han recrudecido. En este caso, la cara más visible de la disputa es la de Jorge Macri, quien se manifestó crítico con el discurso de Milei en el Foro de Davos. Allí, el presidente criticó la «ideología de género» y la homosexualidad y levantó una ola de repudio. Luego de las críticas de Macri, el mismo Milei le respondió en X: «No se pongan en nuestro camino. La Libertad Avanza y lo seguirá haciendo».