
El Departamento de Seguridad Nacional revocó a más de 350.000 venezolanos en Estados Unidos el Permiso Temporal de Residencia
05 feb 2025 . Actualizado a las 05:00 h.La negociación entre el Gobierno de Donald Trump y el régimen de Nicolás Maduro para la excarcelación de seis estadounidenses detenidos en Venezuela —permanecen entre rejas al menos siete más— ha puesto de manifiesto las diferencias que existen en Washington sobre su relación con Caracas.
Aunque el nuevo Gobierno de Estados Unidos ha dicho por activa y por pasiva que no reconoce el cuestionado tercer período de Maduro en Venezuela, lo cierto es que los contactos directos persisten y que EE.UU. no solo no ha incrementado las sanciones a la nación sudamericana, sino que mantiene la poca producción de petróleo que ha permitido a la «revolución bolivariana» equilibrar un poco sus desquiciadas cuentas macroeconómicas.
«Entiendo que un diplomático reuniéndose con Maduro es polémico, pero hablar es necesario», señaló Richard Grenell, el negociador que lleva reuniéndose con el gobierno chavista desde el 2020.
El mandatario venezolano en disputa, por su parte, saludó lo que definió de «primeros acuerdos» con la Administración Trump, pese a que el propio presidente de EE.UU., pocas horas después de la reunión, lo calificó de «dictador», y recordó que reconoce como presidente electo de Venezuela a Edmundo González Urrutia. Este último afirmó ayer que estuvo informado de la visita de Grenell a Maduro «antes y después» de que se produjera.
Por su parte, Marco Rubio, secretario de Estado de Estados Unidos, afirmó que «no hay conversaciones para reconocer a Maduro» y que este «sabe que EE.UU. tiene muchas opciones para infligir un daño grave a su régimen».
Permisos de residencia
Este lunes, la Secretaría del Tesoro renovó por un mes más la licencia para operar en Venezuela a Chevron, que produce unos 150.000 barriles diarios de petróleo, mientras el Departamento de Seguridad Nacional revocó a más de 350.000 venezolanos en Estados Unidos el Permiso Temporal de Residencia (TPS) que tenía vigencia hasta el 2026, alegando «notables mejoras en áreas como la economía, la salud pública y la seguridad» en su país de origen.
El analista venezolano Tony Frangie atribuyó estas aparentes contradicciones «a la colcha de retazos que es el MAGA World», en la que Trump «intenta complacer a todas las partes con promesas vagas pero grandilocuentes».