Starmer destituye a un secretario de Estado por publicar mensajes racistas

El equipo de Keir Starmer le ha vuelto a dar dolores de cabeza. El primer ministro británico destituyó este fin de semana al secretario de Estado de Salud, Andrew Gwynne, luego de que la prensa revelara que realizó una serie de comentarios sexistas, misóginos, racistas y antisemitas a través de un grupo de WhatsApp en el que están otros cargos laboristas.

Pero Gwynne no solo perdió su puesto en el Gobierno, sino que también vio como el partido lo suspendía de su puesto como diputado. Desde Downing Street aseguraron que las medidas prueban que el primer ministro Keir Starmer está «decidido a mantener los más altos estándares para quienes ocupan cargos públicos» y «no dudará en tomar medidas contra quienes no los cumplan». Por su parte, el destituido se disculpó en su cuenta de X por cualquier ofensa causada por sus «muy erróneos comentarios».

De acuerdo con el Sunday Mail, hace unos años, el ya exsecretario de Estado calificó de «chiste» que su partido le permitiera a la diputada Diane Abott, la primera mujer negra en ser electa legisladora, participar en una sesión de control al Gobierno. «Debe ser por el mes de la historia negra», escribió.

La actual vicepremier Angela Rayner también fue blanco de sus polémicos comentarios e incluso una votante de 72 años, a quien le deseó que se muriera luego de que esta se negara a votar por él en las pasadas generales. Como Gwynne hizo estos comentarios en un grupo donde hay diputados, concejales y otros cargos laboristas, desde la dirección de la formación no descartaron que otras personas sean sancionadas.

Gwynne es el tercer miembro del Gobierno que deja su puesto en los siete meses que Starmer tiene en el poder. Sin embargo, es el primero en ser destituido. Tulip Siddiq y Louise Haigh, quienes se desempeñaron como secretaria del Tesoro y ministra de Transporte, respectivamente dimitieron luego de verse envueltas en escándalos políticos y judiciales.

---

---

---