Trump congela 2.200 millones de dólares en subvenciones a Harvard por no aceptar las condiciones que le imponía
INTERNACIONAL

La Casa Blanca acusa a la universidad de permitir que florezca el antisemitismo «sin control». Harvard denuncia que la Administración «invade libertades universitarias reconocidas desde hace mucho tiempo por la Corte Suprema»
15 abr 2025 . Actualizado a las 08:52 h.La Administración de Donald Trump ha anunciado este lunes la congelación de 2.200 millones de dólares (alrededor de 1.900 millones de euros) en subvenciones plurianuales y 60 millones de dólares en contratos plurianuales (unos 53 millones de euros) para la Universidad de Harvard, que horas antes informó de que rechazaba los cambios de política que le exigía la Casa Blanca.
El Grupo de Trabajo Conjunto para Combatir el Antisemitismo, creado tras la vuelta de Trump a la Presidencia estadounidense, ha informado de esta medida a través de un comunicado en el que ha asegurado que la declaración de Harvard «refuerza la preocupante mentalidad de privilegio, endémica en las universidades y colegios más prestigiosos de nuestro país: que la inversión federal no conlleva la responsabilidad de defender las leyes de derechos civiles».
Asimismo, ha considerado que «la interrupción del aprendizaje que ha afectado a los campus en los últimos años es inaceptable» y que «el acoso a los estudiantes judíos es intolerable». «Es hora de que las universidades de élite se tomen el problema en serio y se comprometan a implementar cambios significativos si desean seguir recibiendo el apoyo de los contribuyentes», ha manifestado.
Previamente, el presidente de la Universidad de Harvard, Alan M. Garber, dijo que «ningún gobierno, independientemente del partido que esté en el poder, debería dictar qué pueden enseñar las universidades privadas, a quiénes pueden admitir y contratar, y qué áreas de estudio e investigación pueden seguir». Garber ha aseverado que el fin del antisemitismo «no se alcanzará mediante afirmaciones de poder, desvinculadas de la ley, para controlar la enseñanza y el aprendizaje en Harvard y dictar cómo» funcionan. «La labor de abordar nuestras deficiencias, cumplir nuestros compromisos y encarnar nuestros valores nos corresponde a nosotros definirla y emprenderla como comunidad», ha agregado.
La universidad de Boston aseguró este lunes a la Administración Trump que seguirá combatiendo el antisemitismo en su campus como ha reclamado pero no aceptará sus demandas para evitar el recorte de fondos, que «invaden libertades universitarias reconocidas desde hace mucho tiempo por la Corte Suprema». Abogados del centro enviaron una carta a los miembros del Grupo de trabajo federal para combatir el antisemitismo en la que aseguran que la universidad está dispuesta a erradicar el antisemitismo pero «no está preparada para aceptar demandas que vayan más allá de la autoridad legal de cualquier Administración».
La semana pasada esta prestigiosa institución universitaria ya recibió una misiva con una serie de peticiones para «mantener la relación económica» con el Gobierno federal. Entre estas condiciones, se incluía la eliminación de programas de diversidad, igualdad e inclusión, cambios en la política de contratación y admisión, y limitar a quienes «están más implicados en el activismo que en la enseñanza».
Entonces, la Asociación Americana de Profesores Universitarios y su capítulo de Harvard ya presentaron una demanda con miras a evitar que el Gobierno de Trump «exija que la Universidad de Harvard restrinja la libertad de expresión y reestructure sus operaciones principales». Advertían en la misiva que la universidad «no renunciará a su independencia ni a sus derechos constitucionales».
«Ni Harvard ni ninguna otra universidad privada puede permitirse ser intervenida por el gobierno federal. Por consiguiente, Harvard no aceptará las condiciones del Gobierno como un acuerdo de principios», finalizaba entonces su carta.