Un grupo de sudafricanos blancos parten hacia EE.UU. tras concederle Trump el estatus de refugiados
INTERNACIONAL

Los afrikáners, la minoría blanca que lideró el régimen del «apartheid», afirman ser víctimas de discriminación en su país
12 may 2025 . Actualizado a las 17:57 h.Un primer grupo de afrikáners que afirman ser víctimas de discriminación en Sudáfrica partió la noche del domingo hacia Estados Unidos, donde la Administración Trump los recibirá como refugiados. La partida de 49 miembros de esta minoría blanca, descendiente de colonos neerlandeses y que lideró el brutal régimen del apartheid, en un vuelo chárter financiado por Estados Unidos contrasta con la política de asilo practicada por el presidente estadounidense frente a quienes huyen de la hambruna y la guerra de otras zonas del mundo.
El proceso de asilo suele llevar años. Pero solo han pasado tres meses desde que Trump firmara la orden ejecutiva que establecía el estatus de refugiado para los afrikáneres hasta que los primeros en llegar a Estados Unidos.
Los afrikáner salieron del aeropuerto internacional O.R. Tambo de Johannesburgo con rumbo al aeropuerto de Dulles en Washington, desde donde se desplazarán a Texas, después de que el pasado viernes el viceministro de Relaciones Internacionales y Cooperación de Sudáfrica, Alvin Botes, hablara con el subsecretario de Estado de EE.UU., Christopher Landau, para expresar su preocupación ante el inicio del proceso para acoger y reubicar en territorio estadounidense a presuntos refugiados sudafricanos.
Las relaciones diplomáticas entre ambos países se han tensado desde que Donald Trump ordenó el pasado febrero la suspensión de la ayuda económica a Sudáfrica, acusando a su Gobierno de «confiscar» tierras de la minoría afrikáner y por su postura crítica hacia Israel ante el Tribunal Internacional de Justicia (TIP). Además, Trump emitió una orden que permite a los afrikáners que afirman sufrir «discriminación racial injusta» solicitar asilo en Estados Unidos.
El Ejecutivo sudafricano ha pedido a Washington que aclare el estatus de las personas que saldrán del país, especificando si se trata de solicitantes de asilo, refugiados o ciudadanos ordinarios.También ha reclamado garantías de que esas personas hayan sido evaluadas por las autoridades para confirmar que no enfrentan causas penales.
«Es profundamente lamentable que la posible reubicación de sudafricanos en Estados Unidos bajo la premisa de ser ‘refugiados' parezca tener motivaciones políticas y busque poner en entredicho la democracia constitucional de Sudáfrica», señaló el pasado viernes en un comunicado el Ministerio de Relaciones Internacionales y Cooperación sudafricano.
El ministerio recordó que Sudáfrica sufrió «una persecución real» bajo el régimen segregacionista del apartheid (1948-1994) y el país «ha trabajado incansablemente para evitar que semejantes niveles de discriminación vuelvan a ocurrir». «Sudáfrica reconoce que la determinación del estatuto de refugiado requiere una evaluación objetiva de los hechos y circunstancias», añadió, al considerar que las acusaciones de discriminación por parte de EE.UU. «carecen de fundamento». Aun así, el Gobierno sudafricano aclaró que no impedirá a sus ciudadanos abandonar el país si así lo desean, en ejercicio de su derecho a la libertad de movimiento.