El dalái lama celebra su 90 cumpleaños en una jornada de fiesta tras el desafío a China: «Espero vivir más allá de los 130 años»

La Voz REDACCIÓN

INTERNACIONAL

HARISH TYAGI | EFE

El líder budista ha planteado elegir a su sucesor entre la comunidad tibetana en el exilio. Richard Gere lo acompaña en su cumpleaños y evoca la «tibetmania» de Hollywood

06 jul 2025 . Actualizado a las 12:06 h.

El dalái lama, líder espiritual del Tíbet, celebra este domingo su 90 cumpleaños con una gran ceremonia en su residencia de Dharamshala, en el norte de la India, en un día que marca la culminación de una semana de alta tensión geopolítica con China por el futuro de su sucesión.

Miles de fieles, monjes y dignatarios llenan el complejo del templo Tsuglagkhang, epicentro del exilio tibetano, para el evento principal de este fin de semana de celebraciones, entre un ambiente de expectación y júbilo.

La jornada de hoy no es solo un festejo, sino el punto álgido de una secuencia de movimientos estratégicos que han reimpulsado la postura tibetana frente a Pekín. La semana comenzó con el anuncio del propio dalái lama de que su linaje de 600 años continuaría, un plan que fue inmediatamente rechazado por el Gobierno chino.

A esto le siguió un histórico cónclave de tres días en el que toda la cúpula del budismo tibetano cerró filas en torno a su líder, acordando una nueva estrategia de confrontación directa para desmontar los argumentos de Pekín.

En su aparición pública de ayer durante la ceremonia de larga vida, el premio nobel de la paz vaticinó que espera vivir «otros 30 o 40 años más», un desafío a la estrategia china de esperar su muerte para controlar a su sucesor y con ello el Tíbet.

Pero hoy, en una gran ceremonia en Dharamshala, arropado por miles de fieles, ofreció un discurso centrado en la compasión y la gratitud. En su intervención principal desde el templo Tsuglagkhang, su residencia en el exilio indio, el líder espiritual no hizo referencias directas a la crisis por su sucesión con China. En su lugar, se centró en la esencia de su práctica diaria. «Para cumplir los objetivos de uno mismo y de los demás, yo genero esta mente del despertar (Bodhichitta)», afirmó el premio nobel de la paz.

El líder tibetano explicó que la práctica de la «bodhichitta», combinada con la visión de la vacuidad, es la base sobre la que establece su camino y aquello que le da «el coraje para trabajar por los demás».

Uno de los invitados más destacados fue el actor estadounidense Richard Gere, amigo y discípulo del líder tibetano. En un emotivo discurso, Gere habló en nombre de los seguidores occidentales: «Nunca hemos visto a alguien que encarne totalmente el desinterés, el amor completo, la compasión y la sabiduría. Nunca hemos visto un ser humano como este», afirmó.

La celebración, que tuvo lugar en el templo principal de Tsuglagkhang, estuvo marcada por un ambiente de júbilo y profunda devoción. Miles de peregrinos, monjes y dignatarios siguieron los discursos y los actos culturales, en el clímax de un fin de semana que ha desbordado esta pequeña capital del exilio tibetano en el Himalaya.

El primer ministro de la India, Narendra Modi, felicitó este domingo al dalái lama, líder espiritual del budismo tibetano exiliado en el norte de este país, por su 90 cumpleaños y lo destacó como un «símbolo perdurable de amor, compasión, paciencia y disciplina moral». Desde Estados Unidos, el secretario de Estado, Marco Rubio, reafirmó el apoyo de su país al derecho de los tibetanos a «elegir y venerar libremente a sus líderes religiosos sin interferencias», en un mensaje interpretado como una advertencia directa a China.

Junto a la anfitriona India, EE.UU. es una de las pocas potencias que se ha pronunciado oficialmente, evidenciando la cautela del resto de la comunidad internacional.